La crisis económica en España ha tenido unos efectos devastadores sobre el sector de la construcción. Solo en Aragón, la destrucción de empleo en esa actividad ha alcanzado los 12.000 puestos de trabajo. Pero hay otras muchas ubicadas en la comunidad que han sufrido efectos colaterales negativos. Es el caso de la línea blanca de electrodomésticos, los productores de gres y azulejos o los fabricantes de muebles.