La línea Valdespartera-Parque Goya se pone en servicio hoy al completo. Con 25 paradas, 15 más que hasta ahora, y un total de 12,8 kilómetros, el tranvía llegará por fin al extremo norte, en la avenida Academia General Militar después de que ayer el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, realizara la inauguración oficial con un primer trayecto con viajeros, los casi 300 invitados por el consistorio. Desde las 4.55 horas de hoy, le toca a la ciudadanía someter a examen el proyecto estrella municipal, que prevé mover a más de 100.000 personas al día.

Una puesta de largo que estuvo marcada por los momentos de tensión vividos en la parada de La Chimenea, donde subió Belloch al Urbos 3 mientras decenas de vecinos de Rosales del Canal le esperaban para recriminarle el inicio de las obras de Remar en su barrio, y por la apuesta del primer edil por reforzar frecuencias y comprar convoyes porque la línea será "un rotundo éxito".

CAMBIOS EN ABRIL

"Por lo pronto, CAF debería empezar a construir más convoyes, porque tengo la sensación de que el éxito va a ser de tal calibre que será necesario incrementar el número de frecuencias. Y más que uniendo convoyes, creo que mejor aumentando el número de vehículos en circulación", explicó el alcalde ayer. O lo que es lo mismo, "más tranvía, más frecuencias, más líneas", resumió.

Un refuerzo que podría no tardar demasiado, debido a la saturación que sufre la línea en los picos de demanda que registra en días laborables y, sobre todo, durante los fines de semana, cuando las frecuencias de diez minutos empiezan a ser insuficientes con cierta regularidad. Según ha podido saber este diario, el Gobierno municipal sopesa rebajar el tiempo de paso en horas punta y hacerlo a partir de abril. No se descarta poner frecuencias de cinco minutos, como en días laborables, en las horas más complicadas.

UN 25% MÁS

El problema es hacerlo sin aumentar el número de frecuencias diarias, para no incrementar costes, por lo que se está estudiando ampliar el tiempo de paso en horas valle de escasa ocupación, como en las primeras horas del sábado y del domingo para así reforzar el servicio en los picos más importantes de demanda.

Belloch ayer tocó el tema de pasada, al señalar que la interpretación que hace Los Tranvías de Zaragoza, que es que el flujo de viajeros se empezará a dispersar o distribuir por todas las paradas con la línea completa funcionando, difiere de la que dan los técnicos municipales, que destacan que "habrá más exigencias de tranvías". Más aún cuando la realidad ha demostrado que las expectativas acaban viéndose superadas, "en un 25%", subrayó el primer edil.

Por eso, el alcalde no dudó en calificar la puesta en servicio del trazado completo del tranvía como una "revolución urbana" que "va a cambiar la vida cotidiana de los vecinos" o el acontecimiento más importante para Zaragoza después de la celebración de la Expo 2008. Serán los ciudadanos si esto es así, a partir de hoy.

Ayer tocaba hacerse la foto y celebrar el final de "tres años, siete meses, siete días y ocho horas" de obras, polémicas, críticas y elogios, y afecciones al tráfico y, también, a la vida diaria de los vecinos. Y lo hizo ante unas 300 personas invitadas al acto institucional que subieron con él en La Chimenea y subieron hasta Parque Goya y las cocheras. Una celebración con escasa representación de otras instituciones. Sobre todo de la DGA, que ha contribuido a financiar su construcción.

Entre los invitados, vecinos de los barrios que hoy empezarán a disfrutar por fin --han sido casi dos años de espera-- de la línea 1, Actur y Parque Goya. Ahora podrán hacer un recorrido que conecta la avenida Academia General Militar con laplaza del Pilar en solo 15 minutos. Por delante queda comprobar si este proyecto es capaz de alcanzar las expectativas y mejorar esos 30 millones de usos al año. El reto, conquitar el norte empieza hoy, en el día 1 del tranvía de Zaragoza.