El Departamento de Educación del Gobierno de Aragón no descarta la posibilidad de estudiar la zona única en futuros procesos de escolarización, aunque, de momento, esa opción "no está encima de la mesa". Así se pronunció ayer el director general de Política Educativa, Manuel Magdaleno, en la presentación del proceso de admisión de alumnos para el curso 2013-14 en el que participarán 12.900 niños --140 menos que el pasado-- de 3 años y cuyas familias podrán solicitar plaza a partir del 15 de abril y hasta el 19 del mismo mes --la admisión de los alumnos de ESO, Bachillerato y FP se desarrollará del 25 de junio al 1 de julio--.

"Si la zona única que se va a aplicar en otras comunidades es una ventaja para las familias, lo hablaremos", admitió Magdaleno, que incidió en el deseo del departamento de apostar por la "libertad de elección para las familias", aunque también por la "distribución armónica del número de alumnos en los centros". Así, Aragón estará especialmente atento al desarrollo de esta modalidad en Madrid, que será zona única de escolarización el curso que viene, por lo para el millón de alumnos de la comunidad puntuará lo mismo vivir o trabajar al lado de un colegio que solicitar el de un barrio alejado.

SIN NOVEDAD Pero, de momento, el proceso de admisión de alumnos para el próximo curso apenas depara novedades respecto a años anteriores. Por segundo curso, el domicilio familiar y el lugar de trabajo de los padres puntuarán igual, una medida con la que el departamento pretende "favorecer la libertad de elección de centro de las familias y la conciliación de la vida laboral y familiar", expuso el director general de Ordenación Académica, Marco Rando. Se deberá elegir una de las dos opciones, que vinculará para todos los centros --hasta siete-- solicitados.

Así, Zaragoza capital seguirá dividida en siete zonas de escolarización y se mantiene además el criterio de proximidad lineal de un kilómetro, que se aplicará al domicilio elegido en primera opción. Se conservan también el resto de criterios de baremación, de aplicación para todo Aragón, con la existencia de hermanos matriculados en el centro o padres o tutores que trabajen en él como los aspectos que otorgarán mayor puntuación, seguida por la renta anual, condición reconocida de minusvalía, familia numerosa o enfermedad crónica del alumno.

Por provincias, en Zaragoza está previsto que se inscriban unos 9.760 alumnos, una cifra similar a la prevista el curso pasado. En Huesca solicitarán plaza unos 1.995, 77 menos que en el 2012, mientras que en Teruel la previsión de escolarización es de 1.182 niños de 3 años, 60 menos que el curso anterior.

A la hora de realizar la solicitud, los padres deberán decidir si eligen entre el domicilio familiar o el laboral para establecer el criterio de proximidad. En el primer caso se presentará el certificado de empadronamiento y, si se opta por el centro cercano al lugar de trabajo, los empleados por cuenta ajena acreditarán un certificado emitido por la empresa en el que conste el domicilio laboral y otro actualizado en el que figure la vida laboral. Los autónomos facilitarán, entre otras copias, una declaración responsable sobre el domicilio laboral.