UGT consideró que la reforma fiscal aprobada por el Gobierno no es suficiente, ni justa ni equilibrada pero, además, tiene "tintes electoralistas", dado que lanza un mensaje de rebaja de impuestos pero sin abordar un cambio de fondo del sistema tributario.

En una nota de prensa, el sindicato que lidera Cándido Méndez subrayó que la reforma fiscal consolida muchos de los problemas actuales, "como la diferencia de trato entre las rentas del trabajo y del capital, y beneficia a los que más tienen". Asimismo, reclamó el proceso de diálogo social comprometido por el Gobierno con los agentes sociales el pasado 18 de marzo e incidió en que España necesita un sistema que garantice más recaudación de forma estable para atender los compromisos sociales y financieros que requieren una economía avanzada.

En este sentido, UGT insistió en que el Ejecutivo ha elaborado una propuesta de reforma sin contar con los interlocutores sociales y aseguró que las medidas planteadas no aumentarán la capacidad recaudatoria del sistema impositivo, sino que probablemente la reducirá.

Además, apostó por un sistema más justo que aumente las aportaciones del capital y de quienes poseen más riqueza pero también que ataque "con decisión" el fraude. Así, recordó que España recauda 7,9 puntos de PIB menos que la media de la zona euro (32,5% frente a 40,4%) y es el quinto país por la cola de la UE en recaudación relativa, según los últimos datos de Eurostat del 2012.