"Cualquier persona que se vista con una túnica y se coloque un tambor o un bombo puede participar activamente en la Semana Santa del Bajo Aragón". Esa es una de las claves del éxito de la Semana Santa turolense, según indica Fernando Galve, presidente de la Cofradía del Cristo de Tambores de Andorra y vocal de la Ruta del Tambor y el Bombo que engloba nueve localidades: Albalate del Arzobispo, Alcañiz, Alcorisa, Andorra, Calanda, Híjar, La Puebla de Híjar, Samper de Calanda y Urrea de Gaén.

"La previsión turística para Semana Santa es del 100%, como todos los años", reconoce Fernando Galve. "Es increíble el porcentaje de gente que participa en estos pueblos",dice. Además son unas fechas que superan a las vacaciones de Navidad o a las fiestas patronales en número de visitantes. "Vienen muchos turistas a visitar la Ruta del Tambor y el Bombo y muchos de ellos son personas que tienen una vinculación a la zona y que regresan para estas fechas", explica Fernando Galve.

Desde la Ruta del Tambor y el Bombo, declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional desde el 2014, aseguran no seguir ninguna estrategia turística. "Es que si el tiempo acompaña, no podemos acoger a más gente", explica haciendo referencia al tamaño de los pueblos de la ruta.

El vocal de la Ruta del Tambor y el Bombo se muestra prudente pero es posible que a esta calificación internacional, otorgada por el Ministerio de Industria y Turismo, se añada a las tamborradas de la Ruta del Tambor y del Bombo la de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad el año que viene, calificación a la que son candidatos.

AFLUENCIA MASIVA EN TERUEL

Juan Ciércoles, presidente de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo de Teruel, es optimista en su previsión. La ciudad de Teruel tendrá una tasa de ocupación del 95%; la zona del Matarraña, del 85%; la comarca de Andorra-Sierra de Arcos, del 90%; el Maestrazgo se llenará al 75%; la Sierra de Albarracín estará a un 85%; y Gúdar-Javalambre, al 90% gracias a las "buenas condiciones de la nieve".

Este año, según indica Ciércoles, las reservas se han realizado "con mayor antelación" respecto a años anteriores, una circunstancia que demuestra "la recuperación del sector turístico" tras años a la baja. Del mismo modo, el gasto medio del visitante "se verá incrementado un poco" si echamos la vista a años anteriores. "Los turistas consumen más en restaurantes y cafeterías y van más de tapeo", algo que favorece enormemente al sector de la hostelería y del turismo de la zona.