La Organización Sindical de Trabajadores de Aragón (OSTA), nacida en el 2002 de una escisión de USO, se ha consolidado como el tercer sindicato de Aragón con unos 4.000 afiliados. Este año también será clave para esta central a nivel interno, ya que celebrará el próximo 11 de junio su III Congreso Nacional. Todavía no se conoce nombres de posibles candidatos a la secretaría general ni si el actual número uno, Raúl Sanz Fleta, concurrirá a las elecciones. "Lo que es seguro es que estaré en el equipo que dirigirá el sindicato en los próximos cuatro años pero no sé en qué cargo", apuntó. Sanz lidera OSTA desde hace solo un año, cuando en febrero del 2015 su antecesor, Fernando García, presentó su dimisión aduciendo motivos personales.
La organización está ahora centrada en la designación de los 101 delegados que participarán en la cita congresual y pronto iniciará el debate interno para definir las líneas programáticas de los próximos años.
Este sindicato aragonesista se vio sobresaltado en el 2012 por las presuntas irregularidades cometidas por su excontable, al que OSTA denunció por apropiación indebida. El caso, que está a la espera del juicio oral, hizo aflorar una deuda de 300.000 euros.
Sanz asegura que la crisis no ha dañado gravemente la estructura del sindicato porque "no estaba sobredimensionada". "Ha habido años duros, pero afortunadamente nuestra afiliación ha aguantando", apunta. OSTA cuenta con nueve trabajadores (tres menos que en el 2009) y el presupuesto del 2016 es de 435.000 euros.
