La mala situación del sistema sanitario aragonés ha salido a flote más que nunca con la llegada de la pandemia y las decisiones adoptadas el martes por el Departamento de Sanidad han llevado a los sindicatos sanitarios a gritar más alto que nunca que hace falta personal en los hospitales de la comunidad. Desde Comisiones Obreras (CCOO) denunciaron que la consejera de Sanidad, Sira Repollés, les aseguró que todas las medidas adoptadas «iban a garantizar que todos los profesionales tengan 70 horas de descanso semanales». Lo que supone que estos profesionales tendrán que duplicar su actividad, casi doblar turnos, con muy poco descanso. «Vamos a trabajar 14 horas y a descansar 10. Lo que se está diciendo es que en algún momento se necesitará que doblemos turnos, lo que implica que necesitamos el doble de personal», sentenciaron.

Desde UGT también manifestaron esta necesidad y aseguraron que para hacer frente a la pandemia se necesitaría «duplicar el mismo personal que tenemos actualmente», pero recordaron que «desde el año 2000 solo se ha ido recortando».

Y volvieron a denunciar la falta de material de protección ya que «a pesar de que haya muchos recursos, a veces no llegan a los hospitales». «Pedimos vigilancia por la salud de los sanitarios y que no se escatimen los epis, porque si no se les protege adecuadamente, no tenemos más profesionales» aseveraron desde UGT.

CCOO hizo hincapié en que los especialistas más demandados actualmente son «intensivistas, anestesistas y personas que traten enfermedades infecciosas». Ante estas necesidades, aseguraron que hace unas semanas se les facilitó el borrador para abordar la falta de intensivistas en los centros periféricos. Una petición que «entienden» pero que les lleva de nuevo a afirmar que «las plantillas están muy ajustadas» y que refleja que «no vamos sobrados de profesionales y lo previsible es que esa carencia que existe se va a agravar todavía más».

La medida adoptada el martes por el Gobierno de Aragón según la cual el personal del Salud podrá ser adscrito «temporalmente» a puestos de trabajo que no se ubiquen donde ejercen su labor habitual ha sido muy criticada por las organizaciones sindicales y desde CCOO aseguraron que habían recurrido dicho decreto «por no haber pasado por la mesa general de función pública». Además, ambos sindicatos mostraron su desacuerdo con la manera en la que se les trasladó la información. «La consejera nos citó por videoconferencia y abandonó dicha reunión sin oír a la mitad de las organizaciones sindicales con presencia en la mesa sectorial, cuando consideramos que es un tema del que debemos ser informados y poder opinar», lamentaron.