El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció que va a prorrogar tres meses el Plan de Respuesta a la guerra, lo que conlleva disponer de los 20 céntimos de ayuda en 'gasolina' se amplía al menos todo el verano.

Lo que en principio debía ser una buena noticia esconde una ayuda a la baja, ya que los precios de la gasolina y del diésel no paran de subir y los 20 céntimos de descuento lo son cada vez menos. Los expertos ya hablan de que la gasolina superará con casi toda seguridad los 2,5 euros por litro, y no descartan que se pueda llegar a los 3 euros tras las últimas noticias del veto energético a Rusia por la guerra.

Probablemente precios tan elevados tarden en llegar o nunca lo hagan , pero lo que ya es una realidad es que no hablamos de 20 céntimos de ayuda, sino de unos 18 céntimos por lo que ha subido el precio de la gasolina y del diésel desde el pasado 1 de abril. En ese momento la gasolina 95 estaba a 1,819 céntimos el litro y el diésel a 1,854 euros/litro, cuando a día de hoy el precio de la gasolina 95 es de 2,033 euros y el del diésel 1,899 euros.

A medida estos precios sigan subiendo, los 20 céntimos valdrán cada vez menos, algo que no sucedería si en vez de aplicar un descuento fijo a un precio variable, se redujesen directamente los impuestos a los carburantes. Por no hablar de que la ayuda sería infinitamente superior.

Mejor rebajar impuestos que dar ayudas

Por cada 50 euros de gasolina que se ponen hoy día, prácticamente 25 euros se van directamente a las arcas públicas en forma de impuestos, con el 21% de IVA y el Impuesto Especial de los Hidrocarburos (IEH), que a su vez se divide en tres categorías: Impuesto Estatal General, Impuesto Estatal Especial y Tramo Autonómico.

Si el Plan de Respuesta a la guerra contemplase eliminar de forma temporal estos impuestos en vez de los 20 céntimos de ayuda, hablaríamos de un descuento mucho mayor. En el caso de una persona que pusiese 50 euros de gasolina 95, a los 2 euros que cuenta hoy el litro, se estaría ahorrando 25 euros aproximadamente, mientras que con los 20 céntimos de ayuda se queda en algo menos de 5 euros.

Sabemos que eliminar de un plumazo todos los impuestos es algo imposible, pero un IVA reducido al 10% como se ha hecho con otros productos y servicios, junto a alguna quita en el IEH, ya supondría un ahorro mucho más notable para las familias y definitivo para los profesionales del transporte. Por no hablar de que no menguaría con la subida de los carburantes como sucede con los 20 céntimos de ayuda que se ofrecen ahora.