María Velilla: el sueño americano de un talento precoz

Aunque solo tiene 17 años, para María Velilla (Calatayud, 2007) el golf es una forma de vida y el green su patio de recreo. Como suele suceder en muchas ocasiones, la tradición familiar fue la puerta de entrada por la que este deporte se coló en el día a día de la bilbilitana y su talento precoz hizo el resto. Todavía no ha cumplido la mayoría de edad, pero las categorías inferiores se le quedan, desde hace tiempo, pequeñas. Tanto es así que María puede presumir de haber sido ya campeona absoluta aragonesa de golf en dos ocasiones, la primera cuando solo tenía 15 años. 

«Mi padre y mi hermano mayor jugaban habitualmente y yo me iba muchas veces con ellos. Empecé a probarlo y a los siete años me apunté a una extraescolar que era una hora de golf y una de pádel, pero pronto vi que a mí lo que me gustaba era el golf», rememora Velilla. «Me encantaba esa sensación de estar superándome cada día. Es muy gratificante», añade.

 Lo que empezó como un juego, gracias a su perseverancia y su destreza, fue convirtiéndose poco a poco en algo más. «Cuando tenía 10 años fui a un Campeonato de España y quedé tercera. Ahí me di cuenta de que igual podía ser buena de verdad», recuerda.

Desde entonces, los torneos y los éxitos de la aragonesa se cuentan por decenas, así como las horas de trabajo que hay detrás de todos sus logros y que le han llevado a ser una de las grandes promesas nacionales del golf. «Este año estoy en 2º de Bachiller y compaginar los entrenamientos y los estudios es más complicado, pero de normal entreno dos días entre semana y el sábado o el domingo suelo competir», explica. El último de sus triunfos fue este verano en el Campeonato Absoluto aragonés. «Primero gané el sub-18 y llegué con mucha confianza. Además de ganar, hice con -4 bajo el par la mejor vuelta de mi vida».

Preguntada por sus puntos fuertes en el golf, Velilla contesta sin titubeos. «Llega un momento en el que a nivel técnico todas estamos muy parecidas, entonces creo que la clave está en la parte mental. Estoy trabajando mucho para mejorar ahí, sabiendo afrontar mejor los errores y aprendiendo a gestionar las emociones en la competición».

Su esfuerzo está dando sus frutos y está atrayendo muchas miradas. La Federación Española de Golf ha reclutado a la bilbilitana para participar en varias concentraciones con las mejores golfistas nacionales. Un paso más antes del que puede ser su salto definitivo. «El año que viene me voy a ir a estudiar a Oklahoma con una beca para seguir con mi carrera deportiva», afirma orgullosa.

María Velilla vivirá su particular sueño americano con un objetivo claro y que ha perseguido desde que tuvo uso de consciencia. «Yo lo que quiero es poder ganarme la vida haciendo lo que me gusta». De momento, lleva de sobras camino de ello y la aragonesa no está dispuesta a que se tuerza.