Mujer y deporte
Carlota Escribano, la madrina del cróquet en Aragón
Por azares del destino, el cróquet, un deporte al alza en España, apareció en su vida y la cautivó. Ahora, quiere introducirlo en su tierra y se ha convertido en la embajadora perfecta de un juego que considera «adictivo»

Carlota Escribano, jugando al cróquet / Servicio Especial

El cróquet, un deporte para muchos todavía desconocido, está intentando abrirse paso en Aragón y en ello mucho está teniendo que ver Carlota Escribano. Nacida en la capital aragonesa, la zaragozana se trasladó a Madrid a los 16 años, pero siempre ha tenido muy presente su tierra. Ahora que el cróquet, que llegó a su vida casi de casualidad, la ha conquistado, quiere hacer partícipe a sus paisanos de un deporte que es «adictivo».
Al cróquet juega desde hace alrededor de seis años, «justo antes de la pandemia», recuerda Escribano, pero desde muy pequeña a la aragonesa le encantaba cualquier tipo de deporte, una pasión que incluso ha ido a más con los años. «Mi deporte favorito es el esquí, voy a Formigal siempre que puedo. Juego también a pádel y al golf y soy un poco kamikaze. Si me dicen de tirarme de un paracaídas lo hago encantada», ríe la zaragozana.
Aunque el deporte que más tiempo le ocupó cuando todavía vivía en tierras aragonesas fue el baloncesto. «Jugaba en el equipo del colegio, el Jesús y María, y competíamos en todos los escolares nacionales. Éramos muy buenas, unas campeonas», recuerda Carlota, que incluso enseña un recorte de un antiguo periódico en el que estaba seleccionada en el quinteto ideal de un torneo. Cuando se fue a Madrid, siguió jugando al baloncesto en el prestigioso Canoe, aunque finalmente abandonó su práctica porque dejó de divertirse como acostumbraba.
¿Qué es el cróquet?
Pasaron los años y Escribano, socia del club de La Moraleja de Madrid, quiso, al igual que ahora pasa en Zaragoza, introducir allí el cróquet. Por su insistencia, entre otros motivos, se construyó un campo y ella fue designada la delegada de la sección. «Fue un poco locura al principio porque yo no había jugado tanto, pero la verdad es que cada vez me he ido metiendo más y más y he descubierto un mundo apasionante», subraya. «Es un deporte que está creciendo de manera exponencial y las licencias se multiplican año a año», añade.
El cróquet consiste en golpear la bola con un mazo e intentar ser el primero en pasarla por debajo del aro para sumar punto. Dicho así, suena fácil, pero cada partido, de una duración media de entre 50 minutos y una hora, es un mundo. «Es muy gratificante porque se aprende fácil, pero para mí lo más bonito que tiene es la estrategia. Muchas veces funciona más impedir la jugada del rival que conseguir un punto para ti. Fastidiar es parte del juego», explica. «Tiene cosas del golf, de la petanca y del billar. Como no tiene demasiada carga física lo empezó jugando gente mayor, pero ahora lo hacen personas de todas las edades», asegura Escribano.

Escribano, durante un partido de cróquet / Servicio Especial
Ahora la zaragozana quiere ser profeta en su tierra y transmitir su pasión por este deporte. Por el momento, el único lugar en el que se puede practicar el cróquet en Zaragoza es el club La Peñaza. Escribano ya ha acudido al club en varias ocasiones y muchos de sus socios se han interesado y el número de jugadores aumenta cada día. Y Carlota promete hacer los viajes que sean necesarios para ayudar y resolver todas las dudas que puedan surgir en la puesta en marcha del cróquet en La Peñaza.
Incluso ya se habla de la posibilidad de la celebración del primer Campeonato de Aragón de cróquet, algo que llenaría de orgullo a Escribano. «Llevo mucho tiempo fuera, pero a todo el mundo le digo de dónde vengo. Me siento aragonesa por los cuatro costados y me gusta presumir de ello», termina la que apunta a ser la madrina del cróquet en la comunidad.
- 305 escopetas, 45 rifles, 69 pistolas o 29 revólveres: estas son las armas destruidas tras ser intervenidas
- El pueblo de Aragón con un castillo medieval que da nombre a un famoso modelo de coche
- Real Zaragoza - SD Huesca: ¡La intensidad manda en este inicio!
- Urbanizar ‘Parque Venecia 2’ costará 20 millones y los primeros pisos estarán en 2027
- Síntomas para descubrir a tiempo la enfermedad más mortífera y difícil de diagnosticar
- Brianna Fraser abandona de manera inmediata el Casademont Zaragoza
- El pueblo con peor vista de España está en Aragón: tiene menos de 40 habitantes
- La crónica del Casademont Zaragoza-Jairis: abran paso al aspirante