Papá Noel acaba de llegar y ya tiene los deberes hechos; pero quién más y quien menos, sobre todo a edad temprana, todavía tiene una oportunidad para que ese juguete que no ha llegado desde Laponia venga a lomos de un camello la noche del 5 de enero.

Melchor, Gaspar y Baltasar tienen que ser muy cuidadosos con los regalos que traen a los niños; y estos también tienen que tener en cuenta lo que incluyen en su carta; y si son demasiado pequeños, los padres tienen que ser los responsables.

A la hora de pedir un juguete, hay que tener en cuenta varios consejos como que en el envase y en las etiquetas debe aparecer claramente indicado el nombre, la marca y la dirección del fabricante y/o importador. Todo ello debe aparecer en español.

Las etiquetas y rótulos deben alertar de los posibles riesgos que puede entrañar el uso del producto y la forma de evitarlos. No deben tener bordes cortantes, aristas o clavos que puedan causar daño y hay que prestar especial atención a los juguetes que contengan pilas botón o ventosas, así como aquellos con partes eléctricas o transformadores.

Asimismo, los juguetes no deben incluir bolitas con diámetros inferiores a 4,3 centímetros a niños menores de 3 años, hay que evitar los juguetes fabricados con plástico frágil y quebradizo; y antes de adquirir un juguete conviene comprobar la edad recomendada para su uso.

Y además, hay que guardar el tíquet que viene con el regalo (los Reyes y Papá Noel son muy previsores) ante una eventual reclamación por cualquier incidencia, según la Dirección General de Protección de Consumidores y Usuarios del Gobierno de Aragón.

A pesar del continuo trabajo en este ámbito, en estas fechas navideñas, el director general de Protección de Consumidores y Usuarios, Pablo Martínez, ha insistido en diversas recomendaciones para evitar sorpresas desagradables a los más pequeños y por extensión a sus padres. En los nueve primeros meses del año se incorporaron a la red de alerta de seguridad de los productos un total de 397 juguetes, tanto en el ámbito europeo como en el nacional. Esta cifra representa porcentualmente el 20,6% del total de alertas. Y en cuanto a las reclamaciones, el año pasado se realizaron 33 por juguetes (0,97% del total).