La Feria Internacional de Maquinaria Agrícola (FIMA) será el mejor termómetro para medir la situación que vive el sector agrario. Este escaparate, en el que participarán más de 1.653 expositores de 38 países hasta el próximo sábado, servirá para conocer las últimas novedades en tecnología del campo y las perspectivas del sector en un momento en el que la renta agraria ha caído en los últimos tres años como consecuencia de los bajos precios que se pagan por los productos de los agricultores.
El Clúster de la Maquinaria Agrícola de Aragón celebra su segundo aniversario en el marco de esta feria, donde se presentó en la última edición del 2018. Aunque el clúster no tendrá un stand propio, este año el 80% de sus socios estará presente y allí esperan medir el impacto de la crisis del campo y las rentas agrarias en la venta de maquinaria.
El certamen, que se celebra en Feria de Zaragoza, se inicia sin contratiempos, a pesar de que solo dos días antes se encendían las alarmas por la expansión del coronavirus en el norte de Italia. En la FIMA participan un total de 1.653 expositores, de los que 275 proceden de Italia, es decir, alrededor de una quinta parte.
Sin embargo, el presidente de la Feria, Manuel Teruel, apeló a la “prudencia” y a la “responsabilidad”, ya que “no hay ninguna alarma”. El máximo representante de la institución recalcó que las marcas italianas desplazan a la FIMA a delegados comerciales en España, al tiempo que incidió en que la mayor parte de estas están localizadas en el centro o sur del país, mientras que la crisis del coronavirus se ha localizado en el norte, caracterizado por su desarrollo industrial y no agrícola.
Pese a todo, desde Feria de Zaragoza están en contacto con el Ministerio de Asuntos Exteriores y con el de Sanidad, pero la situación actual es de “total normalidad”, recalcó Teruel. Por tanto, las previsiones y las expectativas se mantienen intactas. La institución ya anunció la cancelación de seis expositores chinos hace algunas semanas, aunque restó importancia al impacto de estas bajas ya que apenas ocupaban un espacio de 100 metros cuadrados
En la última semana han participado en el montaje de la Feria alrededor de 4.000 personas, por lo que está todo a punto para el comienzo de uno de los certámenes más destacados del calendario ferial en Aragón.
INNOVACIÓN E INTERNACIONALIZACIÓN
Antonio Alot, presidente del Clúster de Maquinaria Agrícola de Aragón, recuerda que “si el agricultor no cobra lo suficiente para vivir, no puede comprar maquinaria”. Ambos sectores están íntimamente relacionados, y la pujanza de uno depende, en buena medida, del crecimiento del otro. La internacionalización y la apuesta por los proyectos de innovación son las tablas de salvación del sector de la maquinaria agrícola, que tiene en el mercado exterior una de las grandes bazas para sortear el bache de la crisis del campo español.
Pese a las dificultades, el clúster ha demostrado en estos dos años su fortaleza. Han pasado de las 15 empresas fundadoras a 50 socios, de los que 42 son pymes y ocho, centros colaboradores. No en vano, entre Aragón y la provincia de Lérida se produce el 80% de toda la maquinaria agrícola de España. Además, en este corto periodo de tiempo ya han sido declarados como Agrupación Empresarial Innovadora (AEI).
Uno de los objetivos de su creación era facilitar la cooperación entre empresas del sector para desarrollar proyectos de innovación. Un ejemplo claro de la “colaboración entre empresas que son competidoras pero que trabajan juntas en un proyecto innovador es el de Pirinif, en el que también está implicado el Gobierno de Aragón, para la gestión de purines”, indicó Alot.
El presidente del clúster considera que “ahora llevamos un buen impulso, tanto con los grupos de colaboración a la exportación en Colombia y Francia, como en los proyectos de innovación”, y apunta que uno de los retos presentes es crear una escuela de formación.
