Todos los años, en los 1.200 primeros metros de la autovía de Logroño se registra esta cifra de siniestros. En la segunda carretera con más accidentes de España, en la A-2, cerca de Barcelona, la relación es de 7,7 siniestros por kilómetro y año. Pero la situación no mejora conforme la autovía se aleja de Zaragoza, pues sigue habiendo excesivo tráfico y demasiadas intersecciones. Además, la autovía se convierte en vía de dos carriles entre Figueruelas y Navarra.