Más de 4.000 niños, de los que 137 recalarán en Aragón, y casi 300 monitores saharauis pasarán dos meses de verano con familias españolas de acogida para pasar unas Vacaciones en Paz, un programa solidario del que ya se han beneficiado 23.173 pequeños desde el 2013. El Gobierno central aprobó ayer las instrucciones por las que se determina el procedimiento para autorizar la residencia temporal de estos menores.