Agentes de la Guardia Civil han detenido a 2 personas presuntos delitos de falsificación de permisos y autorizaciones temporales para conducir que eran vendidos a inmigrantes por cantidades que oscilaban entre los 1.000 y los 1.800 euros, e investigado por falsedad a otras 32, a doce de las cuales se les imputan supuestos delitos contra la seguridad vial.

Según informa el Instituto Armado, las investigaciones, realizadas en el marco de la Operación Falsario, se iniciaron a principios de 2019 con el fin de localizar a las personas que distribuían permisos falsificados con falsos sellos de la Jefatura de Tráfico de Huesca, así como a los conductores que se servían de ellos.

Los agentes pudieron identificar a un vecino de la comarca de Monegros de 36 años que supuestamente se dedicaba la venta de autorizaciones temporales para conducir a cambio del pago de las referidas cantidades.

En el registro que se llevó posteriormente en la casa del sospechoso por orden judicial, los investigadores incautaron una gran cantidad de documentación referente a permisos temporales de conducir de distintas jefaturas de Tráfico, informes de aptitud psicofísica, permisos de conducción y de residencia, cartas de identidad de Malí y consulares, fotografías de ciudadanos africanos y varios teléfonos móviles.

Tras el examen de la documentación incauta, los agentes identificaron a un vecino de Madrid de 37 años como presunto responsable de la falsificación de los documentos, que se serviría del otro detenido como intermediario para su venta.

Los dos detenidos fueron puestos a disposición del juzgado de guardia de Fraga, cuyo titular decretó la puesta en libertad de ambos con cargos por presuntos delitos de falsificación de documentos públicos.

Además, en el marco de la misma operación, fueron incautadas en diversas localidades de la provincia otras 4 cartas de identidad y 15 permisos de conducir falsificados originarios de Malí, Guinea, Gambia, Senegal, Camerún, Pakistán, Bulgaria, Lituania y Rumanía, investigándose por este material a 32 personas de edades comprendidas entre los 29 y 41 años.

A doce de estos investigados les fue imputado, además, un presunto delito contra la seguridad vial, al ser localizados cuando se encontraban al volante de sus vehículos con los permisos falsos.