Un soldado de la brigada de Cazadores de Montaña de Jaca, Israel Gurrea, falleció en abril del 2004 en el mismo paso a nivel en el que perdió la vida ayer el hortelano zaragozano, cuando el todoterreno militar en el que viajaba fue arrollado por un tren de mercancías. Otros tres soldados y un sargento resultaron heridos de diversa condición. Dos años antes, en noviembre del 2002, tuvo lugar uno de los accidentes de este tipo más aparatosos que se recuerdan en Aragón, cuando un tren chocó con un dúmper en La Cartuja. Murió una persona de 60 años y otras 36 resultaron heridas por la violencia del impacto, que aun así no llegó a volcar el vehículo de obras. Y dos años antes de este siniestro, en mayo del 2000, dos jóvenes de 19 y 21 años, vecinos de Urrea de Jalón, resultaron muertos tras un choque con un tren Intercity en Casetas. En aquella ocasión sí se trataba de un paso a nivel con barreras, y según Renfe estaban bajadas y funcionaban correctamente, pero aún así el coche invadió la vía. Como en el caso de El Burgo, había un proyecto para sustituir el camino por un paso elevado para salvar la vía, pero tampoco había llegado a construirse cuando ocurrió el siniestro.