La Asociación de Industrias de Alimentación de Aragón y el Cluster de Alimentación de Aragón han detectado en una encuesta que el 45 % de los consumidores demanda alimentos con más propiedades saludables.

Se trata de un proyecto de cooperación que busca como objetivo mejorar la percepción de los productos aragoneses como alimentos con propiedades saludables, informa la asociación.

También apunta el mismo estudio que salud, sabor y precio son los principales factores de compra de alimentos, que 2 de cada 3 consumidores lee siempre la información nutricional de los alimentos y que se prefieren alimentos con menos grasas y aditivos y con más fibra y calcio.

La AIAA y el Cluster están colaborando en este proyecto financiado por el Gobierno de Aragón y fondos FEADER del PDR 2014-2020 para poner de relevancia el potencia saludable de los productos aragoneses de Alimentación.

Fruto de esta colaboración con el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) se ha realizado una encuesta a más de 400 consumidores de edades comprendidas entre los 18 y los 65 años, principalmente de Aragón, para conocer hábitos de consumo y su percepción sobre los alimentos con propiedades saludables.

Las principales conclusiones de esta encuesta han sido presentadas en la jornada celebrada en Centrorigen, y pueden resumirse en que los principales factores de compra de los Alimentos son Salud (69 %), Sabor (53'6 %) y Precio (48'2 %).

La frecuencia de consumo de alimentos a diario es: Leche y lácteos (76 %), Fruta fresca (58'5 %), Cereales, pan, pasta, arroz y patatas (57'5 %) y Verdura y ensaladas (39 %), mientras que el 40 % de los encuestados realiza tres comidas diarias, un 27 % realiza cuatro comidas y un 24 % cinco comidas.

Además 2 de cada 3 consumidores lee siempre o casi siempre la información nutricional de los alimentos, aunque 1 de cada tres reconoce que su nivel de conocimiento al respecto es bajo.

En cuanto a la percepción de salubridad de los diferentes alimentos es muy alto para fruta fresca, verduras y ensaladas, y legumbres; alto para cereales, pan, pasta, arroz y patatas, pescados, frutos secos y leche y lácteos.

Las principales modificaciones que los consumidores encuestados ; sugieren a los alimentos son: reducción de grasas saturadas (93 %), reducción de aditivos (93 %), reducción de azúcar (88 %), reducción de sal (75 %), aumento de fibra (54 %) y aumento de calcio (52 %).

Otros resultados de la encuesta son: 14 % de los encuestados sufren de alergias y/o intolerancias alimentarias (gluten y lactosa principalmente); 22 % afirma que ha seguido una dieta alimenticia en los últimos meses, 51'8 % han consumido alimentos integrales y 34 % alimentos ecológicos.

Otra parte del proyecto contempla informar y asesorar a las pymes alimentarias aragonesas sobre la información nutricional y declaraciones nutricionales que pueden incluirse en el etiquetado de los alimentos.

De este asesoramiento se han extraído las siguientes conclusiones: 40 % de los productos analizados requieren mejorar su información nutricional en el etiquetado; más del 60 % de las muestras analizadas podrían incluir declaraciones nutricionales facultativas previstas en la legislación, entre ellas, principalmente declaraciones relacionadas con: bajo contenido de grasa, bajo contenido de grasas saturadas, alto contenido de grasas monoinsaturadas, bajo contenido en azúcares, fuente de fibra, alto contenido de proteínas y bajo contenido en sal.

El proyecto tiene previsto todavía continuar en los próximos meses, ampliando el número productos de alimentación de Aragón y empresas que serán asesoradas, con el objetivo de realizar recomendaciones a las empresas en la mejora y adaptación de su etiquetado que permitan destacar sus propiedades saludables, así como para colaborar a corto plazo en proyectos de innovación específicos, relacionados con la puesta en el mercado de nuevos productos de alimentación con propiedades más saludables.

La Industria Alimentaria en Aragón es el segundo sector industrial de la Comunidad Autónoma, con un peso en su PIB junto al resto del sector agroalimentario cercano al 10 %. A falta de datos definitivos, el sector facturó en torno a 3.500 millones de euros en 2016, consolidando su puesto como segundo sector industrial de Aragón.

El empleo directo generado por el sector según los datos de afiliados a la Seguridad Social en 2017, superó los 15.000 trabajadores, lo que supuso un incremento superior al 5 % respecto a 2016