El magistrado del Juzgado de Instrucción número 3 de Teruel, Jerónimo Cano, tomará hoy declaración a los cinco farmacéuticos detenidos en los últimos días en la capital aragonesa y en Vera de Moncayo. Hasta el momento hay 22 imputados en este supuesto fraude al Servicio Aragonés de Salud por parte de boticarios.

De sus declaraciones dependerá si estos imputados --Fernando Senante, Domingo y Carlos Alquézar, José Ortiz y Ana Suelves-- ingresan provisionalmente en prisión, tal y como están siete compañeros suyos. Están señalados como supuestos autores de los delitos de estafa, falsedad documental, contra la salud pública, contra la Hacienda y la Seguridad Social y también por blanqueo de capitales. Alguno de estos boticarios ya declaró ayer ante la Benemérita.

La mayoría de las preguntas a las que tendrán que responder giran en torno a la presunta organización que revendía medicamentos a establecimientos de otras comunidades autónomas, incluso en el extranjero.

Asimismo, deberán aclarar si alguno de ellos llegó a usar datos de pacientes fallecidos para hacer negocio o si hizo creer a sus clientes que ya habían recogido sus medicamentos para así redistribuirlos, tal y como adelantó EL PERIÓDICO.

La implantación de la receta electrónica en Aragón permitió, según fuentes consultadas, que el Departamento de Sanidad del Gobierno autonómico descubriera el supuesto fraude cuando observó un aumento del consumo de una determinada medicación en diferentes boticas.

El abogado que defiende a uno de los arrestados --el responsable de la farmacia de Valdespartera-- el penalista Francisco Javier Acín manifestó su deseo de que José Ortiz sea puesto en libertad porque no tiene que ver con la red.

Acín señala que "la situación podría venir de meses atrás cuando en el establecimiento había otros empleados".