Los ciudadanos rumanos son los grandes perjudicados por la entrada en vigor desde hace algo más de un año del decreto de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud que ha supuesto hasta ahora la retirada de 13.681 tarjetas en Aragón, principalmente, a inmigrantes en situación irregular. De ellos, 6.305 --casi la mitad-- son rumanos.
Así lo exponen los datos oficiales de que dispone el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón, que enumera cerca de un centenar de países de origen del total de afectados. Tras Rumanía, pero a una distancia muy considerable, Portugal (934) es la Nación con un mayor número de damnificados y, en tercer lugar aparece España (835) como el país de origen de personas a las que se ha dado de baja en la comunidad tras la aplicación del decreto, aunque en este caso se incluyen fallecidos, congregaciones religiosas, personas que se han trasladado a otras comunidades y rentas superiores a 100.000 euros que pasaron a estar sometidos a un régimen especial. Nicaragua (832), Polonia (792) y Bulgaria (581) son los siguientes en este apartado.
DERECHOS
Esta masiva presencia de ciudadanos rumanos que habrían perdido el derecho a la tarjeta ya fue advertido recientemente por la plataforma Salud Universal, que, además, subrayó que apenas 24 de los 6.305 rumanos habrían accedido al Programa Aragonés de Protección Social de la Salud Pública, un plan con el que, desde finales del pasado mes de abril, la dirección general de Calidad y Atención al Usuario del Departamento de Sanidad trató de paliar esa situación de desatención sanitaria y como una medida para permitir la atención sanitaria --no farmacéutica-- gratuita --sin pasar factura ni compromiso de pago-- a extranjeros sin recursos --con renta inferior a lo estipulado en el IPREM-- empadronados por un periodo superior a seis meses en un ayuntamiento de la comunidad autónoma. El colectivo habría denunciado la "falta de información sobre la existencia del programa" por parte de la Administración sanitaria, mientras que algunos facultativos se vienen sumando a esas críticas a la "ineficacia" del programa por los "complicados trámites".
1.000 EN ONCE MESES
En septiembre del 2012, cuando comenzó a aplicarse el decreto, se retiraron 12.615 tarjetas en Aragón y, desde entonces, se han retirado alrededor de 1.000 más. Aunque, según los datos de Sanidad, hay meses en los que no se producen bajas, lo habitual es que se registre un incesante volumen de retiradas. Así, el pasado mes de septiembre --último del que se existen datos oficiales-- hubo 69 bajas, mientras que en los tres meses anteriores --verano-- se habían acumulado 372. Febrero del 2013 fue el mes en el que mayor índice de bajas se registró, con 618 tarjetas que dejaron de ser autorizadas.
Por centros sanitarios, la incidencia sobre estas personas que dejaron de disponer de la condición de asegurado --principalmente inmigrantes sin papeles-- ha afectado en mayor medida a Sagasta-Ruiseñores, Delicias Norte y San Pablo (Zaragoza) y La Almunia, todos ellos con más de 400 tarjetas retiradas cada uno.
Por sectores, más de 9.000 de los 13.681 casos se han dado en Zaragoza, algo más de 1.000 en Huesca y 717 en Teruel. Precisamente, destaca Barbastro (1.314 tarjetas dadas de baja) como el segundo sector más afectado por detrás de la capital aragonesa. Alcañiz (901) y Calatayud (635) completan el recuento
