El simposio internacional de cáncer de mama que se celebra estos días en Zaragoza está dejando sobre la mesa numerosos avances. Ayer, la doctora del Grupo de Investigación del Cáncer de Mama (GEICAM) Ana Lluch consideró que más de la mitad de los tumores de pecho diagnosticados en su fase inicial «pueden tratarse sin la necesidad de recurrir a la quimioterapia», dijo.

Lluch, jefa del Servicio de Oncología y Hematología del hospital Clínico de Valencia, apuntó que «algo más de un 40%» de pacientes diagnosticadas en fase inicial deben ser tratadas con quimioterapia. Respecto al resto, atendiendo a criterios moleculares y con los datos inmunohistoquímicos, señaló que «un 20% o 25% de pacientes no necesitan quimioterapia y a estas pacientes se les prescribe un tratamiento hormonal. En un porcentaje algo mayor, un 30%, no suele estar clara la conveniencia de utilizar o no quimioterapia», apuntó.

En estos casos se pueden realizar estudios con plataformas genómicas que ayudan a tomar esa decisión. El resultado suele producir un cambio de criterio en el tratamiento aconsejado en un 30% de las pacientes respecto al tratamiento planteado antes de conocer su resultado.

Por otro lado, destacó que en la actualidad «tres de cada cuatro casos de la enfermedad se detectan en fase inicial» gracias a las mejoras en programas educacionales y a las campañas de cribado, que han incrementado los diagnósticos tempranos.

Mamografías digitales / La aparición temprana se traduce en unos índices de curación «cada vez mayores», que cifró entre el 85% y el 87% del total de los casos registrados. «Eso significa que entre un 13% y 15% de casos experimentará una recaída con metástasis pese a haber recibido el tratamiento más adecuado», dijo Lluch.

«Hay un margen de mejora a la hora de precisar mejor el tipo de tratamiento que necesita cada paciente. En eso estamos avanzando y podemos avanzar más todavía», apuntó.

Por su parte, el doctor José Ignacio Chacón, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Virgen de la Salud de Toledo, indicó que las nuevas mamografías digitales con tomosíntesis han contribuido «de forma significativa» al aumento de los diagnósticos en estadios iniciales.

«Representan un avance más que notable y traen cambios importantes en el tratamiento, como el descenso del número de pacientes que se tratan con quimioterapia y plantean posibles cambios en el papel que la radioterapia puede desempeñar en el tratamiento del cáncer de mama temprano», dijo.