Este es el promedio nacional de la presión fiscal por habitante que existe en los 50 ayuntamientos de capital de provincia. Fundamentales para su subsistencia, la población, escasa en la mayoría de municipios aragoneses, hace más necesaria la ayuda del Estado y la DGA. Y aún así, en el caso de Zaragoza y Teruel se ha logrado mantener en los últimos años por debajo del promedio nacional. Solo Huesca lo supera.