Esta es la cuantía que el ayuntamiento lleva gastada en el proyecto del nuevo estadio sin haber puesto un ladrillo. Tres millones para el proyecto de Carlos Lamela, 2,1 en la indemnización a la constructora de la remodelación de la Romareda, otros 832.000 euros a la concesionaria del párking subterráneo, Isolux, tres millones para el proyecto de Joaquín Sicilia y 300.000 por el último estudio de viabilidad.