Que Aragón va camino de convertirse en un desierto demográfico es una constatación empírica y refrendada por los datos. Los últimos que los confirma es el avance del padrón continuo a 1 de enero del 2018: el 86% de los 731 municipios aragoneses no supera el millar de habitantes. 232 ni siquiera llegan al centenar.

Con estas cifras, Aragón se sitúa en el tercer puesto de este escalafón negativo,con 622 municipios con menos de mil habitantes, tan solo superada por Castilla-León (con 2.003 municipios) y Castilla La Mancha, con 64. El porcentaje de poblaciones de más de 10.000 habitantes es también exiguo. Tan solo catorce localidades (contando las tres capitales de provincia), superan los 10.000 habitantes. Son, de hecho, las únicas que prácticamente ven su población aumentada, ya que el resto la mantiene o la pierde ligeramente. Así, Aragón decreció en un año un 0,1%, con 722 personas menos. En total, viven en la comunidad autónoma 1.315.000 habitantes.

Se vuelve a confirmar que la mitad de Aragón reside en Zaragoza, ya que ciertamente el 51% del padrón de toda la comunidad autónoma se concentra en la capital. En ella viven 664. 938 personas, 3.800 más que hace un año. Sin duda, este aumento contrarresta la continua pérdida de población del resto de localidades. Muy pocas menores de mil habitantes han visto aumentada su población, y en el caso de que así haya sido, como el ejemplo de Allepuz, en el que decisiones personales de parejas jóvenes por permanecer en el municipio permiten que la población crezca levemente. Pero son casos excepcionales.

CABECERAS COMARCALES

Las cabeceras comarcales son las que fijan población, aunque la hacen en detrimento, generalmente, de los censos de los municipios de influencia de esa cabecera, que ven cómo muchos de sus vecinos se trasladan a la capital comarcal a vivir. La edad media de los aragoneses se sitúa en los 44 años, casi dos más que la media estatal y cinco más que la de la Unión Europea.

La media de extranjeros que vive en Aragón es muy similar a la española, con 136.000 habitantes, un poco más del 10%. La comunidad rumana supone la más numerosa, con 46.669 vecinos, seguida de la marroqui, con 18.313. El tercer puesto está copado por los nicaragüenses, con 5.644 personas (de las que el 75% son mujeres). Le sigue por poco China, con 5.569. En total, en Aragón viven personas procedentes de más de un centenar de países, incluidos 55 apátridas.

La población empadronada en España bajó en el 2017 en nueve comunidades autónomas, sobre todo en Castilla y León, Extremadura y Asturias, con una caída del 0,7% cada una, en tanto que aumentó en el resto. De manera más acusada en Baleares y Madrid, con el 1,1 %.

En términos absolutos, Madrid (68.825 personas más), Cataluña (40.301 más) y Canarias (18.658 más) experimentaron las mayores subidas, mientras que las principales reducciones se registraron en Castilla y León (18.151 personas menos), Extremadura (7.861 menos) y Galicia (7.369 menos).

TÉRMINOS RELATIVOS

Si se analiza en términos relativos, fue en Baleares y Madrid donde más repuntó la población, el 1,1% en ambas, seguidas de Canarias (0,9%), en tanto que los descensos más destacados se produjeron en Castilla y León, Extremadura y Asturias, todas ellas con una caída del 0,7%.

Al igual que el año pasado, las comunidades autónomas más pobladas siguen siendo Andalucía, Cataluña y Madrid; por su parte, las que tienen menos habitantes continúan siendo La Rioja, Cantabria y Navarra.

En todas las comunidades aumentó la población extranjera, mientras que fue la autóctona la que disminuyó. En gran parte, mano de obra cualificada y joven que abandona España en busca de oportunidades profesionales en países europeos.