José Abadía Tirado ha tomado posesión como subdelegado del Gobierno en Zaragoza en un acto en el se ha comprometido a trabajar por una administración "más eficaz, cercana y abierta", en colaboración con otras instituciones e incidiendo en la protección de los derechos civiles.

Abadía ha prometido el cargo ante la delegada del Gobierno, Carmen Sánchez; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, Manuel Bellido; el fiscal jefe; José María Rivera, y del consejero de Hacienda y Administración Pública del Gobierno de Aragón, Fernando Gimeno, además de su antecesor en el cargo, Ángel Val, entre otras autoridades.

Nacido en Moyuela (Zaragoza) licenciado en Derecho y en Ciencias Políticas, magister en Estudios Sociales Aplicados y diplomado en Función Gerencial en las Administraciones Públicas, José Abadía es funcionario de carrera desde 1981 en el Ayuntamiento de Zaragoza, donde ha trabajado en el área de Urbanismo, Hacienda y Economía implantando sistemas de gestión.

En su discurso como subdelegado ha destacado el cambio de paradigma en la relación entre gobiernos y ciudadanos, que han dejado de ser sujetos pasivos, y ha abogado por el "permanente desarrollo y puesta a punto" de la administración, así como por la colaboración y cooperación y por la calidad en la gestión.

En declaraciones a los medios tras el acto, celebrado en la Delegación de Gobierno en Aragón, ha recordado entre los principales retos de su cargo esta necesidad de acercar la administración a los ciudadanos, lo que entronca con la modernización e introducción de otro tipo de metodologías, la protección de los derechos de la ciudadanía y el "estar atento" a los cambios de la sociedad.

Eso unido a la despoblación y a la lucha contra la violencia machista, cuestiones que no deben ser objetivos a corto plazo ni una apuesta "personal", sino "la apuesta a futuro" y los asuntos importantes para que "se unan y aúnen las fuerzas".

A su juicio, es preciso "poner los cimientos y las estrategias para que se convierta en oportunidad una amenaza".

Abadía ha resaltado asimismo que el servicio público "no permite pensar en el interés particular y quien lo piense tiene que dar un paso atrás" y ha incidido en que es pertinente "incrementar los valores éticos y materializarlos", para lo que se debe empezar por la voluntad política.

Una voluntad que la delegada del Gobierno, Carmen Sánchez, ha ensalzado sobre Abadía, ya que ha subrayado en el acto que una de las máximas del nuevo subdelegado es que "una queja es un regalo por cuanto ayuda a corregir disfunciones en la prestación de servicios públicos".

"Sin duda, toda una manifestación en pro de la mejora continua en el servicio a la ciudadanía", ha enfatizado.

En el acto han estado también presentes, entre otras autoridades y representantes de agentes sociales, la vicealcaldesa de Zaragoza, Luisa Broto, y el vicepresidente de la Diputación de Zaragoza, Martín Llanas, así como la subdelegada del Gobierno en Huesca, Isabel Blasco, que tomará posesión del cargo el próximo lunes. y el de Teruel, José Ramón Morro, que lo hará el jueves 12 de julio