La recuperación del monasterio de Rueda como hospedería para el turismo sigue su proceso se consolidación. Tras la reapertura al público de 32 habitaciones el pasado mes de noviembre, el Gobierno de Aragón prepara ahora la renovación del abastecimiento de agua potable. Esto permitirá reducir la distancia desde la que se realiza la toma, abaratar costes en la gestión y evitar averías en el futuro.

El Gobierno de Aragón ha publicado en el Boletín Oficial el anuncio del estudio de impacto ambiental de unas obras que tendrán una duración aproximada de dos meses. Sin embargo, todos estos plazos se encuentran condicionados a la evolución de la pandemia del coronavirus.

La zona de actuación se localiza en los términos municipales de Escatrón y Sástago, en la comarca de la Ribera Baja del Ebro, en el entorno del río Ebro a su paso por el Monasterio de Rueda. En la actualidad el monasterio y las dependencias turísticas se abastecen de agua potable mediante la captación de agua del río Ebro y su posterior tratamiento por ósmosis inversa. El mantenimiento de dicho sistema debe ser realizado por personal especializado y tiene un elevado coste económico, por lo que desde la DGA «se quieren analizar alternativas que permitan simplificar el mantenimiento y garantizar el suministro ante cualquier eventualidad», como puede ser una avería o la necesidad de limpieza de las instalaciones en épocas de mayor turbidez o ante desbordamiento del río.

Las obras consistirán en la instalación de un tramo de conducción de 1.857 metros desde la red de Escatrón. El documento de impacto ambiental presenta varias alternativas para el trazado de esta tubería. Además, con el objeto de provocar el menor impacto posible sobre el cernícalo primilla, se dará prioridad a actuar fuera de los periodos de reproducción y cría de la especie.