El consejero de Obras Públicas, Javier Velasco, asistió ayer a la apertura al tráfico de la carretera A-1209 entre la localidad oscense de Gurrea de Gállego y la autovía entre Zaragoza y Huesca, que ha supuesto una inversión de 2.800.146 euros y ha sido ejecutada por la empresa Necso Entrecanales Cubiertas.

El proyecto tiene una longitud de 9,6 kilómetros, con un ancho de calzada de seis metros y uno más de arcén en cada sentido, de modo que el coste por kilómetro ha sido de 290.200,70 euros. Su ejecución hay que incluirla entre uno de los criterios de actuación del Departamento de Obras Públicas de la DGA, que apunta a la conexión de las carreteras autonómicas con las vías de la Red General del Estado para procurar una mayor accesibilidad a las comarcas aragonesas.

Los trabajos a lo largo de la A-1209 arrancaron en el punto kilométrico 2, que se corresponde con la salida de la autovía Zaragoza-Huesca, hasta el kilómetro 11,5, sobrepasada ya la población de Gurrea de Gállego, según un comunicado del Ejecutivo aragonés.

TRAVESIA El acondicionamiento incluye tanto una zona interurbana de 8,5 kilómetros como la propia travesía de la localidad de Gurrea de Gállego, con aproximadamente un kilómetro de longitud.

El trazado en planta se ha ejecutado ampliando por un de las dos márgenes de la actual carretera, con un acondicionamiento de las curvas peligrosas que existían en el antiguo trazado de esta vía. La sección tipo está compuesta de explanada tipo E-3; zahorra artificial (20 centímetros) y mezcla bituminosa en caliente. Asimismo, se ha ejecutado una intersección en cruz con la carretera CHE-1428.

Tras la ejecución de las obras, la carretera queda configurada con un ancho de plataforma que se corresponde con las medidas estándar de la Red Autonómica, es decir, tres metros de anchura con un metro de arcén en cada sentido; en total, ocho metros. En el proyecto también se incluyó el tratamiento del puente sobre el río Sotón, en el que se ha ejecutado la consolidación del relleno y la restauración de los estribos y los muros del mismo.

Para actuar en el puente se utilizaron 11.399 kilos de acero y casi 11.000 metros cúbicos de mortero sin retracción para el relleno de los anclajes.