Erradicar el absentismo escolar. Este es el objetivo. Ya no tanto de los nuevos casos esporádico, sino de aquellos casos que se han convertido en crónicos y con difícil solución. Las miradas apuntan a que una de las principales causas es la falta de un sistema de enseñanza adecuado para ellos.

Esta es la reflexión de los trabajadores y educadores sociales que tratan a diario con alumnos de Primaria y Secundaria que dejan de acudir a clase. "El protocolo de actuación diseñado es correcto, el problema es que no hay un sistema alternativo y cuando vuelven al colegio se encuentran con aquello que rechazaron". Insisten en que estos casos crónicos "no se erradicarán hasta que no se creen alternativas". Critican que ocurre todo lo contrario, "el Gobierno tiende a eliminar lo que ya existe, como los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI)" que van a ser sustituidos por la Formación Profesional básica.

Miembros de la comisión mixta, a los que ha tenido acceso este diario y que ha pedido anonimato, aquella que se encarga de analizar los casos y trabajar con las familias de los niños que faltan a clase, aseguran que una de las demandas más generalizadas es "la necesidad de crear un sistema especial". "Si un chaval arrastra fracaso escolar desde Primaría, no se adaptará a Secundaría" por lo que se generará, esta vez, caso de abandono escolar (mayores de 16 años).

COLABORACIÓN El Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza firmaron su primer convenio de colaboración en 1995. Tras varias idas y venidas, este año se ha actualizado y se ha sumado el Salud. Se ha convertido en un convenio marco al que pueden adherirse el resto de municipios de la comunidad.

Según el departamento de Educación, que no concretó el número de estudiantes absentistas, el curso 2012-2013 hubo alrededor de 1.000 casos, "un centenar más que en el año anterior". La mayoría, "más de 700", se localizan en la provincia de Zaragoza. De este año, todavía no hay datos.

La consejera del área, Dolores Serrat, explicó que las cifras en ascenso reflejan que "no se puede bajar la guardia" y que mientras continúen aumentando los casos "habrá que seguir buscando una solución".

El Ejecutivo autonómico no tiene una partida concreta destinada a este programa. A lo largo de las 3.375 páginas del presupuesto del 2014 no aparece ni una sola vez la palabra absentismo. Son los servicios municipales los que se encargan del trabajo con las familias.

Desde la Asociación de Desarrollo Comunitario en Áreas de Aragón (Adcara), que presta apoyo técnico al departamento de Educación en el programa de absentismo, explicaron que el problema "no es que haya más niños absentistas que antes, sino que se detectan mejor los casos y se abordan de forma más temprana".

El compromiso de los profesores para erradicar el absentismo es fundamental. Adcara señaló que los centros escolares cada vez intervienen más y denuncia los casos. "Esto es positivo, indica que los centros docentes se implican más". El primer escalón para tratar de salvar un caso de absentismo es el aula del colegio y la implicación de los profesores y "cada vez están tomando más conciencia y se da más importancia a la escolarización", aseguraron desde la entidad.

FALTA DE RECURSOS El pero del protocolo de actuación es su rigidez. "Tiene niveles muy establecidos y formas de trabajo muy definidas", añaden. Los trabajadores sociales critican, en cambio, que falta personal especializado en los colegios. "Suele haber un trabajador social para varios centros, o está a media jornada". Muchas veces son los propios profesores los que tienen que hacer esta función. Esto en los colegios públicos porque en los concertados la contratación de esta figura es una decisión interna del centro.