La Audiencia de Zaragoza ha absuelto a una familia de la capital aragonesa que el pasado mes de diciembre se sentó en el banquillo por, supuestamente, secuestrar y amenazar de muerte a una amiga. Inicialmente sus miembros enfrentaban a ocho años y medio de prisión.

Los magistrados señalan en la sentencia que ninguno de los procesados, Gloria H. H., su marido, Daniel G. J., y su suegro, Domingo G. S., admitieron las acusaciones y que la única denunciante y testigo es la propia víctima. El tribunal reconoce que «no se le escapa» que pudo haber una detención ilegal, amenazas e incluso algún tirón de pelo y, por tanto, «ser realmente ciertos, pero era preciso que la joven se ratificara en sede judicial y explicara no solo lo ocurrido, sino por qué y cómo ocurrió». Circunstancia que no hizo la supuesta víctima, aparentemente por miedo.

Los abogados de la defensa, Olga Oseira y Joaquín Tortajada, destacaron que la víctima tardó más de 24 horas en denunciar y que lo hizo su madre.