La Audiencia Provincial de Zaragoza ha absuelto a dos promotores inmobiliarios a los que varias familias acusaban de estafa a cuenta de una promoción inmobiliaria fallida en Borja. Consideraban que les habían timado al no terminar la instalación eléctrica de las viviendas, pero los magistrados de la Sección Sexta han considerado, como la Fiscalía, que no hay pruebas de la mala intención que caracteriza la estafa.

Así, los jueces recogen como hechos probados las distintas compras de las viviendas y plazas de aparcamiento, desde abril del 2008, por unos 220.000 las primeras y 20.000 las segundas. Pero también recoge que uno de los empresarios advirtió a los compradores que el suministro eléctrico era provisional, hasta que presentaran los boletines de instalación eléctrica y pudiesen realizar el alta definitiva.

Pero esta no pudo tramitarse, al imponer Endesa un trazado para la instalación que atravesaba una calle privada, lo que requería permisos municipales que la eléctrica no consiguió hasta el 2009. Los promotores trataron de cambiar el trazado, y pagaron la luz un tiempo de su bolsillo, hasta que no pudieron pagar más al quedarse sin dinero. Pero las casas resultaron inhabitables al depender los servicios del fluido eléctrico.