Un vecino de Zaragoza, identificado como G. L. S. M., acabó siendo detenido por tenencia ilícita de armas durante una asistencia sanitaria realizada por una ambulancia del 061.

Fueron los propios facultativos los que llamaron a la sala del 091 para pedir ayuda, puesto que el paciente se encontraba en una situación muy agresiva. Rápidamente se trasladaron hasta el domicilio de este hombre, de 43 años, varias patrullas de la Brigada de Seguridad Ciudadana, si bien cuando llegaron el zaragozano ya se encontraba tranquilo. La sorpresa se la llevaron en el momento en el que de forma espontánea manifestó que tenía escondida en el armario una pistola comprada en el mercado negro para defenderse.

Los agentes abrieron el mueble y comprobaron que ahí había una pistola de 9 milímetros, una caja militar llena de cartuchos, dos machetes de grandes dimensiones y una escopeta propiedad de un familiar. Tras comprobar que no tenía licencia alguna, los policías decidieron intervenir los objetos y proceder a la detención de esta persona. Ayer, tras pasar a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Zaragoza, quedó en libertad provisional.