La A-23 permaneció ayer cerrado al tráfico durante ocho horas como consecuencia de un accidente de circulación protagonizado por el vuelco de un camión cargado de productos alimenticios. La vía se cerró totalmente en el kilómetro 124 en dirección a Valencia desde las 2.00 horas y hasta las 11.00. Durante ese periodo, la Guardia Civil desvió el tráfico en dirección a Levante por la N-234, de trazado paralelo a la autovía A-23. Después se abrió solo un carril, el izquierdo, mientras se procedía a la retirada del vehículo y se reabrió el tráfico sin problemas. El accidente no provocó heridos.