El nuevo acelerador lineal del Hospital Clínico de Zaragoza permitirá tratar al año de 600 a 700 pacientes, quienes precisarán además menos sesiones y sufrirán menos efectos secundarios. Así lo señaló ayer el jefe del servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Clínico, Martín Tejedor, con motivo de la visita que realizaron al servicio el presidente de Aragón, Javier Lambán, y la consejera de Sanidad, Pilar Ventura.

Este acelerador es el primer equipo para el tratamiento del cáncer de Aragón que dispone de la tecnología denominada arcoterapia volumétrica, además de radioterapia guiada por la imagen, lo que supone que lleva integrado un sistema similar a un TAC para realizar imágenes previas a la radiación, asegurando milimétricamente la posición adecuada para cada paciente. Esto permite definir con gran exactitud el volumen a tratar y administrar dosis más altas de radiación sobre el tumor, aumentando las posibilidades de curación y disminuyendo las dosis de radiación sobre los órganos sanos, reduciendo así los efectos secundarios tanto agudos o crónicos.

«El paciente no lo va a notar salvo en el número de viajes» explicó Tejedor, quien puso como ejemplo que si antes un paciente con cáncer de próstata necesitaba cuarenta sesiones ahora necesitará veinte o veintidós.

La puesta en marcha de este acelerador está siendo progresiva y acompasada a la formación del personal y, cuando esté a pleno rendimiento, previsiblemente a finales de noviembre, podrá tratar de 550 a 700 pacientes nuevos al año, dependiendo de la complejidad de las técnicas que se administren. En estos momentos, según Tejedor, ya se tratan once pacientes por la mañana y ocho por la tarde. No obstante, el jefe de servicio reconoció que hasta que Aragón no cuente con seis equipos estará «por debajo de las recomendaciones» y podrá generar problemas de demora cuando algunos de los tres más viejos sufran alguna avería.

En este sentido, la consejera anunció que ya se ha adquirido un segundo acelerador que se espera que esté instalado a finales de este año o principios del 2019. También manifestó la previsión de adquirir otro nuevo para el Hospital Miguel Servet en los primeros meses del 2019, con los que se alcanzarán los seis equipos, tres de ellos nuevos.

El presidente del Gobierno de Aragón destacó que la comunidad «cuenta con un elenco de profesionales de la sanidad absolutamente excepcional», gracias a lo cual el territorio aragonés «figura siempre a la cabeza en calidad del servicio que se presta a los ciudadanos».

Añadió el presidente que, desde el inicio de esta legislatura, el Ejecutivo que comanda se propuso mejorar las condiciones de la plantilla sanitaria y revertir tendencias a la privatización, «como se iba a hacer en el hospital de Alcañiz» pero, también, mejorar las infraestructuras con dos grandes actuaciones como los hospitales de Alcañiz y Teruel, la construcción de nuevos centros de salud y adecuación de otros y la mejora de las plantillas de personal sanitario. Se trata, dijo, de «una inversión importante» en la que espera poder seguir profundizando y, por eso, espera poder sacar adelante unos nuevos presupuestos en el 2019.