Todos los partidos con representación en la Diputación de Teruel han consensuado hoy una declaración institucional en la que rechazan de manera unánime el cierre de la central térmica de Andorra (Teruel) para el año 2020 y exigen a la empresa Enel-Endesa su "implicación activa" en el desarrollo de la zona con un "plan suficiente, cuantificado y negociado".

En la declaración, elaborada para aprobarse hoy en el pleno de la institución, instan al Gobierno de Aragón, al Gobierno central y a Endesa a que la central térmica funcione más allá de 2020 para "evitar los efectos traumáticos" en las comarcas mineras, por lo que piden "medidas extraordinarias que mitiguen el impacto económico y social" que tendría el cierre de una forma "brusca y prematura".

Anuncian un "frente común" de todos los grupos en esta situación y solicitan a la ministra para la Transición Energética y Medio Ambiente que visite "a la mayor brevedad posible" la localidad de Andorra y que exponga allí el plan de medidas que contempla para una "transición justa".

En la declaración los partidos muestran además su "solidaridad" con los trabajadores y los habitantes de las cuencas mientras y resaltan la importancia del carbón como "sector estratégico" tanto por la generación de energía como por su repercusión en la economía, el empleo y la población de la zona.