Una semana más, pero será la última. Es el plazo que se ha marcado la ponencia de obras polémica de la Comisión del Agua de Aragón para intentar cerrar un acuerdo sobre el conflicto del embalse de Santaliestra de forma unánime. Las partes siguen atascadas sobre el punto clave: la posible retirada de los procesos judiciales contra este proyecto y la desestimación de la presa. Si en siete días no se encuentra la fórmula que concilie intereses, se votará el dictamen.

Esta ponencia discute sobre Santaliestra desde finales del verano, tras lograr un acuerdo mayoritario sobre la cota media de Yesa. En estas semanas ha habido un acercamiento muy serio de posturas, pero no hay todavía unanimidad. La semana pasada, el acuerdo total se quedó a un paso, que se esperaba dar ayer. Pero el atasco persistió, según el coordinador de la ponencia, Javier Sánchez.

El punto que impide la unanimidad se centra en los procesos judiciales iniciados por el Ayuntamiento de Santaliestra contra el embalse, que incluyen una querella criminal contra varios exaltos cargos del Ministerio de Medio Ambiente. El municipio quiere que se desestime la presa, pero los regantes del Canal de Aragón y Cataluña no quieren lanzarse a una piscina que los puede dejar sin embalse y con la vía judicial en marcha.

Así, esta semana la Iniciativa Social de Mediación (iniciativa de la Fundación Ecología y Desarrollo que lleva meses trabajando sobre este conflicto) hará un último intento por ver si se puede consensuar entre regantes y municipio un texto que satisfaga a ambas partes y que suponga la unanimidad.

FIN DEL PLAZO Pero el próximo miércoles habrá votación del dictamen, según Sánchez, y si no se alcanza el deseado consenso absoluto, se perseguirá la mayoría más amplia posible, como ocurrió en el caso de Yesa.

Y es que respecto al resto de los puntos analizados por la ponencia el acuerdo sí es total. Todas las partes coinciden en que es necesario apostar por una optimización del embalse de San Salvador, también necesario para el Aragón y Cataluña, que siempre lo ha visto como complementario. El recrecimiento de esta presa, una comisión de seguimiento y control que trabaje para acelerar dicha obra, un buen plan de restituciones para toda la zona afectada y otra serie de medidas de menor calado son asuntos ya asumidos y refrendados por la ponencia.

El desenlace llegará el miércoles que viene y el dictamen resultante se elevará a la permanente y al pleno de la Comisión del Agua de Aragón. Si logra el respaldo mayoritario, será asumido por la DGA, que lo trasladará al Ejecutivo central en la Comisión Mixta de Seguimiento del Pacto del Agua.