El Gobierno de Zaragoza satisfizo ayer una antigua demanda de los sindicatos de la Policía Local con la adjudicación del contrato de suministro de chalecos antibalas -más exactamente, antiagresión-, que contará con un presupuesto de 800.000 euros para dos años, con un precio máximo de 726 euros. La empresa adjudicataria es Fedur S. A., ubicada en Cuarte de Huerva.

Según informó el consistorio, la empresa es la única que ha presentado un diseño que cumple con las exigencias del pliego de prescripciones técnicas en cuanto a seguridad, protección y ergonomía.

Los chalecos que se proveerán son de tipo mixto y cuentan con los requeridos paquetes balísticos delantero y trasero y fundas para su uso interior y exterior.

La adjudicación llega después del proceso fallido del año pasado, en un proceso que despertó las críticas de los sindicatos policiales y llevó, en última instancia, a cancelar la licitación.

El motivo, según denunciaron públicamente los sindicatos CSL y CSIF, fue que, tras haber alcanzado un pliego de condiciones técnicas consensuado con los expertos técnicos policiales, cuando se convocó el concurso vieron con sorpresa que los requerimientos no eran los que habían pactado.

Los chalecos solicitados no eran operativos, según su criterio, y además las condiciones despertaron la sospecha de que solo una empresa podría concurrir. Otras compañías, potenciales candidatas, presentaron igualmente alegaciones al proceso, entre otras cosas porque solo había un plazo de 17 días para presentar un prototipo de prenda de protección.

Ante las críticas, el consistorio optó por cancelar la adjudicación e invirtió la partida prevista de 400.000 euros del año en otras necesidades de vestuario y equipo del cuerpo. Ahora, los pliegos y la empresa adjudicataria cuentan con el beneplácito sindical, según fuentes consultadas ayer, sin sombras de duda en el proceso.