La Audiencia Nacional ha rechazado el contencioso interpuesto por la constructora Azvi para reclamar al Ministerio de Fomento una indemnización de 6 millones de euros por su supuesta responsabilidad en los perjuicios sufridos tras adjudicarse las obras del tramo de la autovía A-22 (Huesca-Lérida) entre Siétamo y Velillas.

Tras la terminación de los trabajos en octubre de 2010, la constructora presentó una reclamación por seis millones de euros ante Fomento que le fue denegada mediante silencio administrativo, por lo que optó por la interposición de un contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional.

En concreto, la representación legal de la constructora alegó haberse visto perjudicada por la suspensión inicial de cuatro meses que fue necesario acordar a fin de culminar el proceso de expropiación de los terrenos necesarios para la obra, así como las "interferencias" que supuso para los trabajos el proyecto de construcción de la variante sur de Huesca. También reclamaban por los trabajos que tuvieron que realizar en invierno a causa de los retrasos, así como por los gastos "extra" sufridos debido a la necesidad de obtener suelo y zahorra en lugares distintos a los previstos en el proyecto.

Sin embargo, el tribunal desmonta todas y cada una de las reclamaciones de la constructora, que se adjudicó en abril del 2007 las obras por 19,3 millones de euros.