Cuatro años de prisión es la pena a la que se enfrenta Ion P. por agredir y amenazar, presuntamente, a un agente de la Policía Local y otro de la Guardia Civil durante un altercado en un bar de Pinseque. Este miércoles se sentó en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal número 4 de Zaragoza, donde dijo que no se acordaba de nada por el consumo de alcohol.

Los hechos se remontan al 10 de octubre del 2018 en el bar Rojer, en la plaza España de la localidad zaragozana. Fue la camarera del establecimiento la que se vio obligada a pedir auxilio al comprobar que el encausado estaba muy alterado y no dejaba de molestar a los clientes. La llegada de los agentes uniformados no le calmó, sino todo lo contrario, según la acusación que ejerce la Fiscalía y el abogado Jorge Piedrafita en nombre de la AEGC, quienes destacaron los insultos y golpes que recibieron los agentes, resultando lesionados dos de ellos hasta que consiguieron meter al investigado en el vehículo para su traslado a dependencias policiales. En las instalaciones policiales procedió amenazar de muerte a los agentes diciendo que la guardia civil era una mierda, que sabía donde vivían que los iba a matar y que era el “jefe de la policía rumana”.

Piedrafita justificó que en como en casos este se pide la pena máxima porque “son graves y porque lamentablemente se están produciendo de forma demasiado habitual en el mundo rural cuando los escasos agentes policiales están garantizando la seguridad de la ciudadanía y resultan lesionados ante agresiones que pretenden saldarse con pactos fáciles y penas ínfimas”. La Fiscalía solicita cinco meses de prisión y multa por resistencia a la autoridad y lesiones leves, en contraposición a la defensa que ha solicitado la libre absolución.