La Audiencia Provincial de Zaragoza juzgará próximamente a Thierno M. como supuesto autor de la violación de una amiga a la que acompañó a casa. Unos hechos por los que la propia víctima y la Fiscalía piden ocho años de prisión y una indemnización cercana a los 3.500 euros, por las lesiones y las secuelas psicológicos.

Los hechos denunciados, como en su día publicó este diario, ocurrieron en la madrugada del 18 de diciembre del año pasado, en la avenida Salvador Allende del Actur. El acusado y la víctima, amigos estaban bebiendo en un bar de esa calle, y pasadas unas tres horas, sobre las 4.30 horas, él se ofreció a acompañarla a casa, en esa misma vía.

Al llegar al portal le propuso subir a casa a tomar la última copa, y ella accedió. Pero tras un rato bebiendo juntos en el salón, en un colchón que la joven utilizaba a modo de sofá, él se abalanzó sobre ella y la inmovilizó, desnudándola y penetrándola durante unos minutos.

Tras el incidente, siempre según las acusaciones, el acusado actuó como si nada hubiera ocurrido, circunstancia que aprovechó la joven para, descalza y sin abrigo, escapar de su casa e ir a la de un amigo, desde donde llamó a la Policía para denunciar los hechos. Los agentes acudieron a la vivienda de la denunciante y encontró allí al ahora acusado, que fue detenido.

La Fiscalía solicita para él ocho años de cárcel por la violación y una multa de 900 euros por el delito leve de lesiones, ya que la joven presentaban numerosas contusiones y hematomas en muñecas, cadera y espalda, entre otras zonas. La propia víctima, representada por la abogada Paula García como acusación particular, solicita el mismo castigo, que incluiría el pago de 450 euros por las lesiones y 3.000 por los daños morales. El ministerio público pide además que, tras cumplir la pena de prisión, el hombre permanezca otros diez años alejado de la víctima.

La defensa de Thierno M., ejercida por Carlos Vela, solicita la absolución, al entender que se trató de un episodio de sexo consentido.