Zaragoza Plaza Center Campus Empresarial, empresa propiedad del constructor Agapito Iglesias, canceló un crédito de ocho millones de euros a favor del Real Zaragoza diez meses después de que vencieran los tres últimos pagarés emitidos por la sociedad pública Plaza a favor de la matriz del grupo, Codesport, por la construcción de las naves de Autocity.

El magistrado del Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza, Francisco Picazo, investiga en el llamado caso pagarés si alguien delinquió al reconocer a Codesport un aumento millonario sobre el precio inicialmente pactado y al aceptar facturas y emitir pagarés por 8,7 millones. En la causa están imputados, además de Iglesias, el exgerente de Plaza, Ricardo García Becerril; el exconsejero delegado de la empresa pública y exviceconsejero de Obras Públicas, Carlos Escó, y, desde ayer, el exdirector técnico del complejo, Miguel Ángel Pérez.

La obra fue adjudicada por 14 millones y, tras una modificación, liquidada por 32, aunque un informe de la DGA limita el sobrecoste a 7,5 millones --8,7 con IVA-- que luego reduce a 6,6.

Codesport emitió el 1 de diciembre del 2008 cuatro facturas que sumaban 8,7 millones: 0,87 por modificados, 1,77 y 1,97 por revisión de precios y 2,9 por sobrecostes. El 15 de diciembre, Becerril y Esco firmaban cuatro pagarés por ese mismo valor: uno de un millón vencía el 1 de junio del 2009, mientras que los otros tres --por 2, 2,2 y 3,3-- lo hacían en la misma fecha del año siguiente. Escó admitió que carecía de autorización para rubricar el último por pasar de tres millones.

DESEMBOLSO

Diez meses después de ese último vencimiento, el 27 de abril del 2011, Zaragoza Plaza Center Campus Empresarial cancelaba mediante un ingreso bancario de ocho millones de euros el capital y los intereses pendientes de un crédito a favor del Real Zaragoza SAD del que se había convertido en avalista, junto con Codesport e Iglesias personalmente, en noviembre del 2006.

Ese crédito forma parte de una triple operación crediticia concedida en el 2004 por Ibercaja, CAI y Cajalón en la que aparecían como fiadores, por la misma cuantía de ocho millones cada uno, el Real Zaragoza --le supuso la hipoteca de la Ciudad Deportiva--, Alfonso Soláns y la DGA. La parte de Soláns fue asumida tras la venta de la SAD por el soriano y dos de sus empresas, aunque los derechos participativos terminaron más tarde en manos de Praleya, empresa participada también por Iglesias que se encuentra en fase de liquidación. El Gobierno de Aragón, por su parte, lleva meses cubriendo las cuotas trimestrales de 340.740 euros que no atiende la SAD.

Zaragoza Plaza Campus Center Empresarial participó en esas fechas en una operación en la que, según señala un informe de la Cámara de Cuentas, obtuvo un sobreprecio de 7,4 millones de euros. Se trata de la compra, del edificio PC-1 de Plaza por 19,74 millones cuando el precio, según el órgano de fiscalización, no debía haber pasado de 12,32.

Suelo y Vivienda fue autorizada el 8 de septiembre del 2010 a contratar el crédito que había formalizado el 6 de agosto para financiar la compra.