La empresa Aguas de Barcelona (Grupo Agbar) propuso ayer al Ayuntamiento de Zaragoza un proyecto para poner en marcha en el azud del Ebro un nuevo sistema tecnológico, pionero en el mundo, que permita generar un aprovechamiento energético del salto de agua del azud de Vadorrey. Un planteamiento que fue bien recibido por el alcalde, Juan Alberto belloch, que ayer se reunía en la casa consistorial con el presidente de la compañía catalana, Ángel Simón. El primer edil, incluso se mostró partidario de que la capital aragonesa pueda sacar "cierto beneficio" de esta prueba piloto, aunque la empresa, que ahora lleva el mantenimiento de esta infraestructura, garantizó que esta inversión, que rondará el millón de euros, no obligará a que permanezca ni a adjudicarle a ella la gestión. "La prueba piloto será la aplicación del know how que se pueda exportar", declaró.

Además, ambos reconocieron que la ejecución de este proyecto pioner requerirá de una intervención en el cauce del Ebro y que necesitará del visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), con la que afirmó que ya se están entablando conversaciones. Mientras, la experiencia la presentarán a nivel internacional el próximo 22 de marzo, coincidiendo con el Día Mundial del Agua --con el lema Agua y Energía--.

Para Simón lo más importante es la "maduración" de este tipo de iniciativas. La conclusión es el ahorro de costes y, si es posible, el beneficio para las ciudades que lo quieran aplicar, aunque es pronto para hablar de ello, ya que no existe una experiencia igual en todo el mundo, aseguró Simón, quien destacó que este proyecto podría enmarcarse en el Centro de Investigación y Desarrollo de Milla Digital, que nunca llegó a crearse.

Por otra parte, el aprovechamiento energético no es una idea nueva vinculada al azud. Desde que se concibió su construcción iba ligado a un proyecto similar que iba a realizar Endesa y que iba a ayudar a financiar las obras. Pero no llegó a hacerlo, lo abandonó por inviable y puso en riesgo la creación de esta pasarela en Vadorrey. Ahora lo que ha cambiado, según Simón, son "las nuevas tecnologías" que ahora sí existen.