La Academia General Militar (AGM) de Zaragoza celebró ayer el 136 aniversario de su constitución (entonces en Toledo) con el tradicional acto de entrega de condecoraciones a los cadetes, militares y civiles que han colaborado con la institución, en un acto presidido por el teniente general José Carrasco Gabaldón, jefe del Mando de Personal del Ejército de Tierra.

En los últimos años, la vocación internacional de la institución educativa se refleja en la entrega de los despachos de alférez a los cadetes de tercer curso que pasaron el primer cuatrimestre en la academia estadounidense de West Point. Ayer, además de esta entrega a cinco de ellos, destacó la recepción por parte de la AGM de la medalla Escuela Militar de Cadetes por parte de las Fuerzas Armadas de Colombia, por las relaciones bilaterales.

Además, el secretario general técnico de la Consejería de Innovación, Investigación y Universidad del Gobierno de Aragón, Fernando Beltrán Blázquez, recibió su nombramiento como Caballero Cadete Honorífico, en atención también a su labor docente en la AGM.

También recibieron el premio Coronel Vázquez Landa (primer jefe de estudios de la institución) el teniente coronel Luis Dendariena Ortiz de Zárate y Beatriz Rodríguez Soria, profesora del Centro Universitario de la Defensa (CUD).

El acto englobó también el reconocimiento a la primera sección de la primera compañía del primer batallón, que ganó el premio Teniente García Cabrelles al haber vencido en la competición deportiva que se organiza entre los alumnos. Y una felicitación al coronel Enrique Gaitán Monje, que en breve dejará la AGM, donde ha ejercido tres años como jefe de estudios. Al parecer destinado a algún país anglosajón, a tenor del «all the best» (todo lo mejor) que le dedicó el general director Luis Lanchares.

El acto concluyó con el homenaje a los caídos y el desfile, con alguna gorra voladora de más fruto del fuerte cierzo que soplaba en las instalaciones.