Bajo el hashtag #NoQuieroPremioDeLadrones algunos profesionales de la salud españoles saltaron ayer a las redes sociales para rechazar el premio Princesa de Asturias de la Concordia. No fue la tónica habitual. En Aragón, en general, fue bien aceptado, aunque con matices.

Concha Ferrer, presidenta del Colegio de Médicos de Zaragoza, dijo estar agradecida. «Que te den un reconocimiento es algo magnífico, otra cosa es que la sanidad necesite una reforma profunda. Si te dan un galardón lo agradeces, claro, igual que cuando te aplauden. Lo que queremos es que no se quede en un mero formato de premio, sino que haya un análisis profundo del sistema sanitario. Hay que que revisarlo porque, teniendo un sistema bueno, ha hecho aguas. Es lo que hay que solucionar. No se trata de que los sanitario rindan al 200%, sino de estar bien preparados».

Ferrer achaca los problemas surgidos desde la aparición del covid-19 a que algunas cosas han quedado «desfasadas», lo que indica claramente que hay que hacer «cambios profundos» y no volver a descuidarse en la dotación económica. «Hubo una disminución en la inversión y saltaron las alarmas, aunque eso no significa que le tengamos que hacer un desaire al premio. Lo que sí nos gustaría es que se acompañe de otras cosas por el bien de todos, no solo de los profesionales sino también de los pacientes. Pero eso no significa que lo vayamos a despreciar».

La presidenta de los médicos zaragozanos aseguró que se está haciendo acopio de material «por lo que pueda venir», pero que se debe aprender porque «lo ideal sería depender de nosotros mismos e ir a un mercado propio, no tener que estar pendientes de las decisiones de otros mercados», señaló Ferrer, que no quiso profundizar en la sentencia que condenó al Gobierno de Aragón: «Sí que fuimos un poco tardos en la respuesta, pero no sé hasta qué punto hubo posturas negligentes».

Por su parte, la presidenta de la Confederación Estatal Sindicato Médicos (CESM) Aragón, Mercedes Ortín, fue más crítica, aunque también aceptó de buen grado el galardón porque es un reconocimiento que «viene bien», aunque «no sea suficiente» y debería haber sido previo «y sin déficits de financiación».

«Hay que cuidar la sanidad como un pilar fundamental. Nosotros hemos hecho nuestra la labor en una crisis, pero nos han dejado sin protección, sin equipos, y eso no hay que olvidarlo. Insisto en que no viene mal, pero de reconocimientos no vimos», dijo Ortín, que aseguró que en cuanto a equipos aún no se está al día, sobre todo para el 061 y quienes tenga que trabajar atendiendo «en las carreteras a 38 grados», añadió la sanitaria antes de concluir que la sentencia contra el Gobierno de Aragón le ha parecido «perfecta», aunque no opina lo mismo sobre que hayan decidido recurrirla.