Pedro (nombre ficticio para salvaguardar la identidad de la víctima), de 87 años, regresaba a su casa, después de dar un paseo por el parque José Antonio Labordeta el pasado miércoles. Ayudado con un bastón caminaba por la calle Arzobispo Morcillo, a la altura del número 30, cuando un individuo le atropelló con un patinete eléctrico de uso compartido. Un hecho que no quedó ahí, ya que el sospechoso aprovechó la situación de inestabilidad del anciano para agredirle a puñetazos.

Un inexplicable suceso que está en manos de la Policía Nacional, después de que los hijos de este hombre interpusieran una denuncia. Tal y como relata uno de ellos a EL PERIÓDICO, eran sobre las 18.30 horas cuando este hombre de 87 años andaba por esta calle perteneciente al distrito zaragozano de Universidad.

Según los testigos, el usuario del patinete iba circulando de manera temeraria por la acera, llegando a jugar con los peatones como si fueran obstáculos a los que tratar de sortear. No pudo o no quiso hacerlo con Pedro, a quien acabó atropellando. El hombre se desestabilizó, si bien no llegó a caer al suelo gracias a que se apoyó en el bastón y en la niña que iba subida al patinete junto al sospechoso. Ella llevaba otro de juguete que no estaba usando.

Un gesto que, al parecer, no le debió gustar al individuo, quien comenzó a darle puñetazos al anciano. «Había una pareja en las inmediaciones y gracias al chico que rápidamente se acercó y le separó de mi padre, de haber estado solo no sé qué sería de él», lamentó este hombre.

Ante ello, este hombre cogió a la niña en brazos y salió corriendo dejando el patinete tirado sobre la acera. Inmediatamente se trasladó a este lugar una patrulla de paisano del Cuerpo Nacional de Policía que asistió al hombre y que trató de contactar con uno de los hijos de Pedro para trasladarle a un centro sanitario.

Como consecuencia de esta agresión, el hombre, que es un paciente de Sintrom, sufre de contusiones y hematomas en las lumbares y en las extremidades. No obstante, no fue necesario su ingreso en el hospital.

Ahora el Cuerpo Nacional de Policía trata de identificar y localizar al autor de estos hechos para detenerle como supuesto autor de un delito de lesiones. Para ello va a ser necesaria la colaboración de la empresa del patinete compartido que empleaba el sospechoso, quien, al haberse registrado en la aplicación para hacer uso de la misma, tiene toda la información con respecto a esta persona.

La familia de este hombre de 87 años todavía sigue en shock por la agresión sufrida. «En primer lugar no está permitido que dos personas vayan encima de un patinete eléctrico, pero que la reacción a atropellar a un anciano sea golpearle no se entiende», lamenta uno de los hijos.

Tiene la esperanza de que tarde o temprano sea arrestado el sospechoso y que la Justicia le castigue por su comportamiento «para que no lo vuelva a hacer». También lamentaron la falta de educación que demostró, especialmente, porque iba en compañía de una menor de edad.