Los agricultores aragoneses reciben animados y reconfortados el temporal de nieve que desde ayer afecta a la comunidad autónoma, tras una sequía sin apenas precipitaciones en los últimos 5 meses en la provincia de Teruel y sur de la de Zaragoza.

Para el secretario general de UAGA, José Manuel Penella, se trata de unas nevadas "in extremis" debido a la situación en que se encontraban estas zonas y dado que la mayor parte de la superficie agraria en Aragón es cereal de invierno.

En declaraciones a Efe Penella cree que aunque se habrá perdido grano, los agricultores no pierden la esperanza de que aún haya tiempo para que germine, pero para ello ha reconocido que también es necesario una primavera "perfecta" con lluvias "sin parones".

Desde Asaja, su secretario general, José Manuel Cebollada, ha destacado que la nieve "siempre es bienvenida" no solo para el cereal sino para los pastos y manantiales.

No obstante, ha advertido de que en el cereal se mantiene "la incertidumbre" debido al retraso que lleva la germinación, una "situación inédita en la que no han caído 10 litros en 5 meses", ha lamentado Cebollada, y a la que ahora se suman las heladas que se anuncian a partir de mediados de semana.

Pero, en cambio, va a ser bueno para poder preparar la siembra del girasol, ya que hasta la fecha tampoco se había podido por falta de agua.

El responsable de UPA, José Manuel Roche, no ha ocultado su alegría por estas nevadas, especialmente en la zona del Jiloca, una de las más afectadas por la sequía, y en la que, ha asegurado, se han acumulado unos 25 centímetros de espesor.

Aunque ha reconocido que "no hay que lanzar las campanas al vuelo" porque se ha perdido mucha semilla, confía en que la que se ha salvado pueda germinar y les salve de las "pérdidas millonarias" a las que se veían abocados.