El Consejo de Gobierno tomó ayer conocimiento del anteproyecto de la nueva Ley de Caza de Aragón, cuyos objetivos son mejorar la gestión de las reservas de caza, clarificar cuestiones legales y simplificar trámites administrativos que afectan directamente al cazador.

El titular de Presidencia, Roberto Bermúdez de Castro, destacó que la caza es una actividad que genera "muchos ingresos" y puestos de trabajo en Aragón, que unas 50.000 personas la practican, que hay unos 1.400 cotos. El anteproyecto persigue facilitar la burocracia al cazador y al gestor de los terrenos cinegéticos, favorecer el relevo generacional y la conciliación de los intereses agrarios y cinegéticos, resolver en mayor medida la problemática de accidentes de tráfico producidos por especies de caza y actualizar el funcionamiento de las reservas tuteladas por el Gobierno de Aragón.