PROFESION ES EL DIRECTOR DE INVESTIGACION Y OPERACIONES DE LA OLAF (OFICINA EUROPEA DE LUCHA ANTIFRAUDE).

DATOS PERSONALES NACIO EN TURIN (ITALIA) HACE 53 AÑOS.

TRAYECTORIA HA EJERCIDO DURANTE 20 AÑOS COMO JUEZ Y FISCAL.

--La OLAF lucha contra todo tipo de fraudes dentro de la Unión Europea. ¿Cómo lleva ser el director de estas acciones?

--Mi función es diferente de la que desempeñaba en los tribunales. Ahora dirijo las investigaciones contra ladrones y contrabandistas, algo que requiere mucho trabajo y atención.

--Y aparte de atención, ¿qué más se necesita para capturarles?

--Primero investigación y luego coordinación. Nosotros desde OLAF recabamos información sobre todos los posibles sospechosos. Una vez obtenida la información, se pasa a las fuerzas del orden de cada país en el que se producen los delitos para que sean ellos los que actúen. En España se cuenta con la colaboración de la Guardia Civil.

--¿Y cuales son los delitos más habituales que se cometen?

--El contrabando de tabaco es uno de los más comunes. Pero también tratamos el contrabando de marcas de ropa, materiales electrónicos, joyas, piratería de discos compactos y películas en DVD e incluso productos agrarios. Lo nuestro es investigar lo que afecta a los intereses económicos de la UE.

--¿Tanto daño hacen esos productos?

--Sí, porque no se pagan impuestos al transportarlos de un país a otro. Lo más habitual es que las mercancías ilegales pasen camufladas en contenedores de productos no problemáticos. Una de las prácticas más fraudulentas consiste en mentir sobre el lugar de origen de los contenedores, de manera que se pagan menos impuestos.

--Entonces, controlar esos movimientos debe de ser un trabajo meticuloso...

--Sí, porque los contrabandistas, en cuanto sospechan que les estamos investigando, cambian de tácticas, de fronteras e incluso de productos, ya que por lo general son grupos organizados que se dedican a la delincuencia en general y diversifican su campo de actividad.

--¿Está hablando de mafias?

--No exactamente. Yo hablo de células perfectamente jerarquizadas, donde hay mucha gente que trabaja en diferentes aspectos y que posee almacenes, vehículos, casas... Y por supuesto hacen sobornos para obtener dinero.

--¿Sólo buscan contrabandistas o hay delitos todavía más ocultos?

--Claro, no todo es contrabando. Es más difícil investigar a gente aparentemente normal, como los funcionarios de la Unión Europea cuando realizan actividades irregulares e ilegales.