Las langostas no són el único problema que azota a Munébrega en los últimos días, según su alcalde, José Félix Lajusticia. El primer edil reclamó ayer más guardias civiles en los puestos y cuarteles repartidos por las áreas rurales y ha advertido del aumento de la delincuencia que está sufriendo esta localidad en los dos últimos años. El alcalde ha indicado que el último robo se produjo en la madrugada del pasado viernes en una carnecería y una vivienda contigua.

Este ha sido, según el alcalde, el quinto robo que sufre Munébrega en los últimos quince meses. Los anteriores se produjeron en el bar de la localidad, en el estanco y en las piscinas municipales. José Félix Lajusticia afirmó que esta situación contrasta con las declaraciones realizadas la semana pasada por el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández López, que abogó por cerrar puestos y cuarteles de la Guardia Civil de las áreas rurales que están con muy pocos agentes.