El alcalde de Biscarrués, junto a los de Santa Eulalia de Gállego, José Antonio Casaucau, y Murillo, Marta de Santos, denunciaron ayer que el informe de la Comisión Europea en la que cuestiona la actuación de España respecto a la construcción del embalse de Biscarrués «desacredita » toda la actuación del Gobierno en política hidráulica al señalar que el proyecto incumple la directiva de aguas, sin buscar la «mejor solución» para el uso de los caudales del Gállego. Así lo indicó en una comparecencia tras conocerse que Bruselas ha emitido un informe muy duro contra el procedimiento en este embalse.

Según el edil, el informe ratifica las alegaciones presentadas por los municipios afectados contra el proyecto y los argumentos utilizados en la demanda interpuesta en la Audiencia Nacional en oposición al embalse. Por ello, solicitó la dimisión y la destitución de los políticos y técnicos que han participado en los distintos trámites vinculados al proyecto de Biscarrués, entre los que citó al actual presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Raimundo Lafuente, como parte del equipo redactor de anteproyecto de la obra. También reclamó la apertura de expedientes informativos a todos los funcionarios que han intervenido en la tramitación del proyecto de embalse.

Torralba ha justificado su petición de responsabilidades en la elevada cantidad de dinero público «malgastado» en el proyecto, y en el cuestionamiento de una obra que, según ha afirmado, «tiene los días contados«. Por su parte, CHA va a pedir a la Comisión Europea la revisión, con carácter de urgencia, de la política hidráulica española, especialmente de los proyectos que han sido «desastrosos» para el medio ambiente, como a su juicio es el embalse de Biscarrués.