El alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha plantado hoy terminar la reurbanización del Coso Alto, donde queda pendiente el tramo comprendido entre la plaza de la Inmaculada y el final de la vía. En declaraciones a un medio de comunicación, el regidor oscense ha manifestado su satisfacción por el desarrollo de las obras de reurbanización del Coso Bajo y por el reciente inicio de la segunda fase de las obras de reforma del paseo Ramón y Cajal.
Son dos actuaciones «muy necesarias y demandadas», ha dicho, sin las que «no queda completado el centro de la ciudad». Por este motivo apuesta por reurbanizar el último tramo del Coso Alto y también las calles adyacentes. «Queda, todavía, mucho trabajo de reurbanización y de acondicionamiento del centro de la ciudad», comenta.
Por otra parte, Luis Felipe considera necesario actuar en la urbanización de la plaza de la Unidad Nacional, dando continuidad a la reforma llevada a cabo en el Coso Bajo y en el paseo Ramón y Cajal, lo que, según su previsión, se rebasaría el tiempo de la actual legislatura, dada la envergadura de la obra.
La reurbanización y peatonalización del Coso oscense, en sus dos tramos, fue iniciado en el 2013 por la alcaldesa popular Ana Alós, que llevó adelante la transformación del centro urbano hasta el 2015. Inicialmente, el proyecto causó cierta oposición popular y entre los comerciantes, que temían sufrir graves pérdidas durante las obras. Sin embargo, una vez acabados los trabajos, el comercio y la hostelería recibieron un fuerte impulso como consecuencia del incremento de la afluencia de público.
El proceso de peatonalización supuso expulsar el paso de vehículos a las calles adyacentes, que se saturaron, y además generó una fuerte demanda de plazas de aparcamiento. Sin embargo, con el paso del tiempo, los oscenses han asumido que un centro urbano peatonal resulta más habitable y depara muchas más ventajas que inconvenientes en la vida cotidiana de la ciudad.
Nuevo parque de bomberos
La ciudad de Huesca contará con el nuevo parque de bomberos esta legislatura, según avanzó ayer la concejala de Seguridad Ciudadana, Ana Loriente. El Ayuntamiento de Huesca licitará las catas del solar donde posteriormente se construirá el nuevo parque y posteriormente el proyecto de construcción.
El futuro Parque Municipal de Bomberos de Huesca se levantará sobre una parcela de 10.000 metros cuadrados junto al vivero de la Diputación Provincial, muy cerca de la rotonda del Mulo. El proyecto de la necesaria instalación ha sufrido retrasos, ya que la ampliación del cuartel Sancho Ramírez se proyectó en el terreno en el que el consistorio pensaba edificar el nuevo edificio, por lo que se cambió de emplazamiento y las cuestiones administrativas derivadas de su propiedad han dilatado los trámites en el tiempo.
Con este nuevo servicio, Huesca ampliará su capacidad de respuesta ante toda clase de emergencias, que podrán ser atendidas desde una ubicación muy cercana al centro.
