La ya exalcaldesa de Oliete, la socialista Josefina Pastor, que ayer perdió su cargo al prosperar la moción de censura que le presentaron CHA y PP, sopesa renunciar tanto al puesto de concejal que asume desde ahora como al que ocupa como consejera comarcal y vicepresidenta de la comarca de Andorra-Sierra de Arcos. "Tengo que hablar con los responsables de mi partido, pero sí, estoy pensando en dejar todos los puestos. Dimitir y dejar todo en manos de mis abogados para que de una vez por todas se airee la verdad", comentó Pastor a este diario. "Quizá el lunes ya haya tomado una decisión".

Josefina Pastor se vio obligada a ceder ayer la alcaldía a Pedro Millán, del PP, partido que recibió el apoyo indispensable del único concejal de Chunta en el pueblo, Alejandro Cunillera, que hace unas semanas decidió retirar su respaldo al PSOE para dárselo al PP mediante una moción de censura. El nuevo alcalde tomó posesión del cargo en el pleno extraordinario celebrado ayer a mediodía, al que asistió el presidente provincial del PP, Manuel Blasco.

"ACOSO Y DERRIBO" Josefina Pastor agradeció el apoyo que le ha prestado su partido tras el "acoso y derribo" a que se ha visto sometida por el concejal de CHA. Las relaciones entre ambos se deterioraron y en diciembre de 2003 el concejal nacionalista rompió el pacto de Gobierno firmado inicialmente y denunció a la alcaldesa por agresiones.

Cunillera ganó dos juicios de faltas por agresiones verbales y físicas de la alcaldesa --el segundo está recurrido-- y finalmente promovió con los tres concejales del PP la moción de censura para apartar a Josefina Pastor de su puesto.

Las negociaciones entre CHA y PSOE para buscar una salida que evitase esta moción de censura concluyeron el martes por la noche sin que hubiera ningún tipo de acuerdo.

La dirección provincial del PSOE no aceptó la propuesta de CHA de sustituir a la alcaldesa por otro concejal de su partido a fin de eludir la moción de censura.

Toda la polémica se ha visto salpicada por el robo que se produjo la madrugada del pasado sábado en la sede del ayuntamiento, donde desaparecieron documentos tanto del despacho de la alcaldesa como de la secretaria municipal. También desapareció el aparato de audio que se utilizaba normalmente para grabar las intervenciones de los concejales en los plenos.